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El Congreso de 2021 tendrá la mayor cantidad de mujeres de color de la historia

Next year’s Congress will feature at least 51 women of color – more than ever before. Ballots are still being tallied in two close races, so the number could climb. Marilyn Strickland is the first Black person to represent Washington state at the federal level and is one of three Korean American women ever elected to the U.S. House of Representatives. And New Mexico will have its first House delegation that is all women of color.

Habrá más mujeres de color juramentadas en el 117° Congreso de Estados Unidos que nunca, con al menos 51 mujeres de color. Las boletas todavía se están contabilizando en dos elecciones cerradas, por lo que el número podría aumentar.

En el oeste de Washington, la demócrata Marilyn Strickland fue elegida la primera persona negra en representar al estado a nivel federal y es una de las primeras coreano-americanas electas para la Cámara de Representantes de Estados Unidos.

“Creo que, si tuviéramos más mujeres en posiciones de liderazgo y poder, podríamos resolver algunos de nuestros mayores problemas”, señaló. “El beneficio de tener más mujeres en la mesa, y especialmente mujeres de color, es que la formulación de políticas y la toma de decisiones son simplemente mejores”.

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Strickland explicó que parte del propósito de su nuevo puesto sería cultivar un grupo de mujeres de color para escaños políticos abiertos y tener conversaciones con ellas sobre la reforma del financiamiento de campañas. Aunque muchas mujeres se postulan para cargos públicos, las mujeres de color enfrentan algunos obstáculos importantes, señaló, el mayor de los cuales es financiar sus campañas y obtener el apoyo de los votantes.

Las mujeres demócratas de color obtuvieron los mayores logros; sin embargo, las mujeres republicanas ganaron algunas de las carreras más competitivas. En el condado de Orange, Michelle Steel y Young Kim recuperaron los distritos que los republicanos perdieron en las elecciones de mitad de período de 2018. Steel y Kim son dos de las tres primeras mujeres coreano-americanas elegidas para la Cámara.

En Nuevo México, la republicana Yvette Herrell recuperó el segundo distrito del Congreso de manos de la representante demócrata Xochitl Torres Small. La demócrata Deb Haaland, una de las primeras mujeres nativas americanas elegidas al Congreso, fue reelegida, al igual que la demócrata Teresa Leger Fernández, lo que le dio a Nuevo México su primera delegación en la Cámara compuesta en su totalidad por mujeres de color.

La congresista electa Fernández señaló que los efectos de la pandemia fueron peores entre las comunidades de color, y espera aportar su experiencia para abordar los problemas que enfrentan.

“Espero que 2021 sea el comienzo del cambio que necesitamos en este país, donde empecemos a enfocarnos en lo que necesitan nuestras comunidades para que puedan prosperar”, comentó Fernández. “Nuestro objetivo debería ser que tengamos un Congreso que refleje a Estados Unidos”.

Nuevo México y otros 23 estados han elegido a 78 mujeres de color para ser congresistas, hasta la fecha. California ha enviado más mujeres de color a la Cámara de Representantes y al Senado que cualquier otra entidad, un total de 17 hasta ahora. Los votantes en California también han elegido a más mujeres para el Congreso que otros estados, 43 en total. Vermont es el único que nunca ha enviado a una mujer al Senado o a la Cámara.

Esta elección estableció un récord para Missouri, donde la demócrata Cori Bush se convirtió en la primera congresista negra del estado. Bush representará el primer distrito de la entidad, que incluye Ferguson y St. Louis.

También es un año histórico para las mujeres en general, con al menos 141 mujeres ganando escaños en esta elección, superando el récord anterior de 127 establecido en 2019, según el Centro para Mujeres y Política Estadounidenses de la Universidad de Rutgers. El conteo de votos en Georgia y Luisiana aún no ha concluido, por lo que estos números pueden aumentar.

Aunque su número asciende constantemente, las mujeres —y, en particular, las mujeres de color— siguen estando subrepresentadas en el Congreso. Las mujeres constituyen el 51% de la población de Estados Unidos, pero forman solo el 24% de los líderes del Congreso.

“No hay techo ni límite. Por eso, no deberíamos limitarnos y decir: ‘Está bien, esta es la barrera que hemos cruzado y ahora hemos terminado’”, señaló Strickland. “El trabajo siempre continúa”.

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