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San Diego baja algunos impuestos al cannabis para fomentar la producción local

Una hoja de marihuana en una planta en un cultivo de cannabis en Gardena, California.
(Associated Press)

El cabildo aprueba una reducción del 8 por ciento al 2 por ciento a pesar de que se calcula que se perderán hasta 4 millones de dólares en ingresos.

El cabildo de San Diego aprobó una reducción de algunos impuestos municipales sobre el cannabis para fomentar la apertura de más granjas de cannabis de interior y fábricas de comestibles de cannabis.

El cabildo votó 6-3 para reducir la tasa de impuestos sobre las instalaciones de producción del 8 por ciento al 2 por ciento. Las dos docenas de dispensarios de San Diego seguirán pagando la tasa del 8 por ciento.

Los partidarios dijeron que la tasa de impuestos de San Diego sobre las instalaciones de producción de cannabis, que es una de las más altas del estado, está desalentando a esas empresas a abrir en la ciudad.

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Solo 19 de las 40 instalaciones de producción aprobadas por la ciudad han abierto, creando un vacío en la cadena de suministro local que obliga a algunos dispensarios locales a traer su cannabis a San Diego desde otros lugares.

Los partidarios dijeron que otros inconvenientes de tener menos instalaciones de producción incluyen menos puestos de trabajo en el sector del cannabis local y mayores oportunidades para que el mercado negro del cannabis local prospere.

“Se lo debemos a nuestros propietarios de negocios locales y a los que operan negocios legales para tener la oportunidad de competir aquí mismo en la ciudad”, dijo el regidor Raúl Campillo.

Los críticos de la reducción de los impuestos sobre el cannabis dijeron que los ingresos fiscales generales de San Diego, que se han visto más afectados por la pandemia porque la ciudad depende mucho del turismo, no pueden permitirse ninguna reducción.

También se quejaron de que San Diego carece de un programa de equidad de cannabis para ayudar a las personas de bajos ingresos y a las minorías a acceder a la lucrativa industria que tiene costos iniciales relativamente altos.

“Tengo un gran, gran problema con la reducción de la tasa de impuestos para una industria que no hemos abierto a todo el mundo”, dijo la regidora Mónica Montgomery Steppe.

Funcionarios de la ciudad dijeron que el programa de equidad de cannabis de San Diego está programado para estar listo para operar en algún momento de este año.

El regidor Joe LaCava propuso retrasar la fecha de la reducción del impuesto sobre el cannabis del 1 de mayo a enero de 2023 para que el programa de equidad esté en vigor, pero su propuesta de enmienda no recibió suficiente apoyo.

El presidente del cabildo, Sean Elo-Rivera, propuso añadir una cláusula de caducidad de tres años, lo que facilitaría que la ciudad volviera a ajustar el impuesto al alza si los ingresos caen drásticamente. Esto tampoco recibió suficiente apoyo.

Los partidarios de bajar el impuesto dijeron que los ingresos de la ciudad aumentarían a pesar de la tasa más baja, porque muchos más negocios de cannabis comenzarían a operar y a pagar los impuestos de la ciudad.

Sin embargo, un análisis realizado por el analista presupuestario independiente (IBA) de la ciudad estimó que San Diego perderá entre 2 y 4 millones de dólares en los próximos cinco años por la reducción de los impuestos sobre el cannabis. Un análisis realizado por el tesorero de la ciudad estimó una pérdida menor de ingresos.

Gina Austin, la principal abogada de la industria del cannabis de la región, dijo que el análisis del IBA se basaba en la suposición errónea de que las instalaciones de producción de cannabis aprobadas, pero no abiertas, acabarán abriendo sin una reducción de impuestos.

“Esto no es en absoluto cierto”, dijo Austin, afirmando que sus clientes optarían por abrir en otras ciudades con tasas impositivas más bajas. “No tienen intención, bajo ningún concepto, de quedarse aquí si el tipo impositivo no disminuye”.

La regidora Marni von Wilpert dijo que también le preocupaba la posibilidad de bajar la tasa de impuestos a las empresas que no han sido consecuentes con el pago de sus impuestos municipales. Von Wilpert señaló que el tesorero de la ciudad ha tenido problemas para cobrar los impuestos adeudados por algunos negocios de cannabis, pero terminó votando a favor de la tasa más baja.

Los tres votos en contra de la propuesta fueron emitidos por Elo-Rivera, Montgomery Steppe y LaCava. Debido a que la propuesta es una ordenanza de la ciudad, requerirá una segunda aprobación por el cabildo el próximo mes.

El impuesto sobre el cannabis de San Diego fue aprobado por los votantes de la ciudad como Medida N en 2016. La medida de la boleta electoral incluyó el aumento de la tasa de impuestos del 5 por ciento al 8 por ciento en 2019, pero también dio al cabildo la discreción de moverlo en cualquier lugar entre cero y 15 por ciento.

En una votación separada, el cabildo aprobó una nueva tasa anual de 20 802 dólares para todos los negocios de cannabis de San Diego para cubrir la supervisión y regulación de la División de Negocios de Cannabis de la ciudad. La nueva tasa fue aprobada 7-2, con LaCava y el regidor Chris Cate votando no.

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