A medida que Las Vegas comience a reabrir, apueste por tarifas más bajas y multitudes más pequeñas

Después de una hibernación forzada que ha durado unos dos meses, el gigante dormido que es Las Vegas está comenzando a agitarse.

Cerca de 35 propiedades, incluyendo el Sahara y Treasure Island, comenzarán a aceptar reservas el 22 de mayo, con la esperanza de atrapar a los huéspedes ansiosos de escaparse para el fin de semana del Día de los Caídos. Wynn-Encore espera abrir el 26 de mayo, el día después del día festivo federal, pero esa fecha está sujeta a cambios, basados en el día en que el gobernador Steve Sisolak permita la reapertura de los hoteles-casinos.

Le espera una experiencia muy diferente en una ciudad que recibió 42.5 millones de visitantes el año pasado.

“Diría que va a ser una experiencia bastante disminuida durante las primeras semanas, si no varias semanas antes de julio”, dijo Anthony Curtis, editor del Las Vegas Advisor, un boletín para visitantes frecuentes. Otros se hacen eco de su sentir.

“Creo que tomará algo de tiempo acostumbrarse”, consideró David Schwartz, un historiador de juegos de azar de la Universidad de Nevada-Las Vegas. “Pienso que será una experiencia diferente, en la que no estarás hombro con hombro en la mesa de juego”.

Para mantener el distanciamiento social, la Junta de Control de Juegos de Nevada limitará las mesas de juego a seis jugadores. Las mesas de blackjack se limitarán a tres. Las fichas, las cartas y los dados serán desinfectados.

El distanciamiento social será imperativo en la estrategia de reapertura, dijo Bill Hornbuckle, presidente interino y director ejecutivo de MGM Resorts International.

En su propiedad del Bellagio, por ejemplo, “sólo vamos a ocupar 1.200... de las 4.000 habitaciones”, expuso. “El plan es sólo dejar entre el 25% y el 30% de las visitas normales en la puerta, para que la gente pueda mantener el distanciamiento social... sin preocuparse de que estén abarrotados o invadidos”.

Otros cambios en el horizonte

•Cámaras de imágenes térmicas en las entradas de los complejos turísticos comprobarán la temperatura de los huéspedes cuando lleguen. Las personas con temperaturas superiores a 100.4 grados serán rechazadas y se les alentará a buscar tratamiento médico.

•En las propiedades de MGM, los huéspedes pueden evitar la fila al registrarse en una aplicación. Su dispositivo móvil también puede actuar como llave de habitación.

•En el Bellagio y New York-New York, las dos primeras propiedades de MGM Resorts en volver a abrir, los jugadores del casino serán recibidos con estaciones de lavado de manos, con fregaderos, jabón y desinfectante.

•En varias propiedades, se proporcionarán kits de amenidades que contienen máscaras, guantes y desinfectante de manos. Se animará a los huéspedes, pero generalmente no se les exigirá que usen una mascarilla.

•Las salas de exposición y otros lugares de entretenimiento permanecerán cerrados en el futuro inmediato. MGM Resorts dice que será por lo menos el 1 de julio antes de que cualquier espectáculo, como “O” de Cirque du Soleil en el Bellagio, se vuelva a presentar.

¿Las multitudes más pequeñas son una ventaja?

El ajetreo y el bullicio de Las Vegas (grupos reunidos en torno a un ganador en una máquina tragamonedas, en una piscina o en la acera frente a las Fuentes del Bellagio) serán omitidos, y los empleados del complejo se encargarán de mantener a los extraños separados.

“Casi podría ser algo positivo”, dijo Curtis. “Habrá un menor número de personas; podrá desplazarse, moverse, hacer cosas”.

“Si quiere toda la multitud, entonces tiene que esperar. Si realmente lo va a molestar, que no es la forma en que lo recuerda, entonces no querrá venir aquí en junio”.

Sin embargo, la normalidad está muy lejos, señaló Hornbuckle: “Creo que hasta que estemos en 2021... Nuestro objetivo no es necesariamente ganar dinero. Es perder menos dinero y recuperar a la gente de la fuerza laboral”.

Los centros turísticos también cuentan con el regreso de los californianos del sur que generalmente viajan a Nevada en automóvil.

“Va a ser la ‘Pequeña California’”, dijo Curtis. “Creo que se verán muchos residentes de California desde el principio, especialmente el grupo más joven, y los fines de semana serán relativamente buenos en Las Vegas desde el principio”.

“Pienso que lo que realmente va a dictar mucho de esto es que las aerolíneas van a ser un elemento disuasivo más grande que los propios casinos. Los vuelos no van a llegar [tan rápido]”.

La expectativa de Curtis de que los adultos jóvenes sean los primeros en regresar se ve impulsada por la demografía ya cambiante. Casi el 40% de los visitantes de Las Vegas ya son milenios, y Curtis cree que muchos de ellos tienen una actitud de “esto no me puede lastimar” con respecto a COVID-19, consideró.

Los precios serán un atractivo

Los precios bajos también pueden ayudar a atraer nuevamente a los visitantes.

“Estoy absolutamente seguro de que vamos a ver unas tarifas realmente tremendas”, enfatizó Curtis.

Entre el número limitado de propiedades que aceptan reservas para el 1 de junio, aquí hay una muestra de los precios de las habitaciones por noche (a partir del 11 de mayo). Las tarifas de resorts de $32 a $45 y los impuestos no están incluidos; los precios serán más altos los fines de semana:

•Bellagio: $139
•Caesars Palace: $99
•Cosmopolitan: $160
•New York-New York: $29
•Sahara: $76
•Treasure Island: $98
•Wynn: $169

¿Dónde está el entretenimiento?

La industria del entretenimiento será más lenta en recuperarse. Robbie Williams, quien cautivó a la multitud en Encore en noviembre pasado, canceló sus ocho conciertos de julio, instando a sus fans en un comunicado de prensa a “mantenerse a salvo y bien”.

“Life is Beautiful”, una gran celebración de las artes que atrae a más de 185.000 personas al centro de Las Vegas cada septiembre, ha cancelado su festival de 2020.

Un punto brillante es el Museo del Neón del centro de la ciudad, que planea reabrir el 22 de mayo. El museo al aire libre exhibirá cuatro obras del director de cine y artista Tim Burton, cuya popular exposición fue clausurada cuando el museo cerró abruptamente junto con el resto de Nevada a mediados de marzo.

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