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Hágalo Usted Mismo: Siembre un jardín de la victoria ahora y cultive sus propios alimentos

Un jardín de la victoria puede ayudar a levantar su espíritu durante estos tiempos difíciles.
(Dabsy Myla / For The Times)

Bien, las consecuencias de esta pandemia son malas, pero gente, es hora de dejar de retorcerse las manos.

Deje el control remoto, aléjese del refrigerador y haga algo que realmente pueda marcar la diferencia: cree su propio jardín de la victoria.

Tal vez sólo tenga espacio para unas pocas macetas en un balcón soleado o en el alféizar de una ventana. Eso funciona. Coloque una planta de tomate en una maceta grande y profunda y albahaca a su lado, y tendrá los ingredientes para una ensalada o una salsa marinara en sólo unos meses.

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Tal vez tenga lugar en su patio: un espacio con césped al que nunca le da uso o un rincón cubierto de hierba en la parte más soleada de su patio. Cúbralo con cartón y 8 pulgadas de mantillo, riegue bien y comience a plantar, llenando los agujeros con abono y tierra orgánica para macetas hasta que la magia del mantillo en láminas cree un suelo rico y saludable.

Sí, estas son pequeñas victorias contra un enemigo enorme e invisible, pero también son un golpe contra la impotencia, el aislamiento y el miedo. Es parte de nuestra herencia como sociedad: los estadounidenses tienden a rebelarse contra los mandatos, pero aceptan voluntariamente los llamados patrióticos a la acción.

En serio, ¿cuál es la desventaja de cultivar unas cuantas verduras? ¿Demasiada vitamina D por trabajar al aire libre? ¿El bronceado de un granjero? ¿Tanto producto que podría tener que compartir? Los bancos de alimentos ya están viendo duplicar la demanda. Plantar alimentos ahora puede ayudarlo a usted y a otros a superar los inciertos días que se avecinan.

También es una excelente manera de mejorar su salud mental.

Créame; cuando estoy pendiendo de un hilo, mis plantas me mantienen cuerda, y todo lo que piden es un poco de agua, sol y afecto.

Aquí hay algunos consejos para hacer su propio jardín de la victoria:

1. Elija un lugar soleado

Encuentre un lugar para su parcela (o macetas) de jardín que reciba al menos de seis a ocho horas de luz solar. ¿No está seguro? La jardinera profesional Lauri Kranz de Edible Gardens L.A. y coautora de “A Garden Can Be Anywhere”, recomienda tomar una foto de su jardín cada dos horas entre las 8 a.m. y las 4 p.m. para ver dónde puede encontrar el sol más consistente.

2. Prepare su suelo

Preparar la tierra antes de plantar es lo más importante que puede hacer para tener un jardín exitoso (después de asegurarse de que recibirá suficiente sol). El abono, el estiércol envejecido de buey, las algas marinas y otras enmiendas orgánicas pueden ayudar a crear un suelo rico y arcilloso lleno de los microbios beneficiosos que ayudan a las plantas a obtener el agua y los nutrientes que necesitan. No es necesario desenterrar todo el suelo; simplemente agregue las capas de enmiendas orgánicas y use un tridente de jardín para mezclarlas. Si no dispone de tiempo o de enmiendas orgánicas, llene sus contenedores elevados o los hoyos de plantación de su jardín con tierra orgánica para macetas, que está llena de los ingredientes saludables que necesita.

3. En caso de utilizar contenedores

Si está plantando en macetas, utilice tierra orgánica para macetas, nunca tierra regular, que tiene todos los nutrientes que sus plantas necesitan para un buen comienzo. Para plantas con raíces profundas como tomates, pimientos y berenjenas, elija una maceta al menos hasta la rodilla. Verifique la profundidad de las raíces en esta tabla creada por la oficina de Extensión Cooperativa del Condado de Los Ángeles y añada al menos 4 pulgadas a las profundidades estimadas para asegurarse de que las raíces tengan suficiente espacio, dice la maestra jardinera Yvonne Savio, creadora del blog GardeninginLA.net.

4. ¿Cómo va a regar?

La técnica más fácil es un sistema de irrigación por goteo que riega automáticamente dos o tres veces por semana. Kranz coloca mangueras de irrigación de media pulgada en un extremo de sus cajas de contenedor elevadas y luego coloca mangueras perforadas de un cuarto de pulgada a lo largo de la caja, a 6 pulgadas de distancia. La irrigación por goteo también es buena para mantener el agua fuera de las hojas para evitar el moho con plantas como el calabacín y los pepinos. Savio prefiere enterrar cubos de vivero de 5 galones (del tipo con orificios de drenaje en la parte inferior) para que la parte superior esté a 4 pulgadas por encima del suelo. Luego planta alrededor de los baldes y los llena con agua una o dos veces a la semana para que la humedad penetre profundamente en la tierra. Esa técnica alienta a las raíces a crecer profundas, para que estén mejor protegidas del calor del verano. Independientemente del sistema que elija, riegue profundamente dos o tres veces por semana, en lugar de sesiones cortas y frecuentes que impiden que el agua penetre profundamente en el suelo.

5. Elija sus cultivos

Antes de comprar, haga un plan basado en el espacio disponible y las cosas que su familia realmente va a comer. Este es un buen momento para plantar en el sur de California, ya que todavía puede sembrar una cosecha de ensaladas de crecimiento rápido, como lechuga, rúcula, espinacas y rábanos, que tendrán tiempo de madurar antes de que el calor del verano provoque que las plantas se “atornillen” o produzcan semillas. Mientras tanto, comience los cultivos de temporada cálida ahora para que puedan asentarse bien en la tierra antes del inicio del calor más alto del verano. El maíz y las calabazas pueden parecer divertidas, pero requieren mucho terreno, así que asegúrese de tener espacio. Savio y Kranz recomiendan elegir verduras que sepa que comerá su familia, y tal vez una sorpresa, como una berenjena o una alcachofa, para presentarle a su familia un nuevo alimento. Los tomates, pimientos y berenjenas se cultivan más fácilmente a partir de plántulas, pero los profesionales recomiendan plantar tanto semillas como plántulas con cultivos como calabaza de verano, pepinos, remolacha y judías para escalonar sus cosechas.

6. Incluya hierbas y flores

Incluya hierbas en su jardín, lo más cerca posible de la puerta de su cocina, y recuerde incluir flores como el cosmos, capuchinas y girasoles, así como hierbas con flores como el hinojo y la albahaca africana. Savio tiene una lista útil de lo que debe plantar, enumerada por mes, en su sitio web.

7. Añadir mantillo

Una vez que planta, cubra el suelo con una capa gruesa (por lo menos 4 pulgadas) de mantillo orgánico, como paja, hojas o abono. A Savio también le gusta agregar una fina capa de granos de café, pero recomienda no más de media pulgada de profundidad, ya que los granos pueden repeler el agua si se aplican demasiado gruesos. El mantillo ayuda a preservar la humedad y a disuadir las malas hierbas mientras alimenta el suelo a medida que se descompone.

8. Visite regularmente

Visite su jardín varias veces a la semana, si no todos los días, para admirar su progreso, asegurarse de que las plantas reciben suficiente agua y evitar cualquier infestación de malezas o insectos. Invierta en un buen cultivador de maleza hula hoe o una azada diamante para cortar las malas hierbas en su base, dejando que sus raíces se descompongan y alimenten el suelo. Cuando las plantas de su jardín empiecen a florecer, use un fertilizante orgánico para darles un impulso adicional para empezar a dar frutos. Kranz prefiere un fertilizante orgánico de algas mezclado con agua que rocía sobre las plantas, algo que los niños pueden hacer con una regadera. Los profesionales dicen que la mejor protección contra las plagas es mantener las plantas sanas y actuar rápidamente una vez que se ve una infestación. Ni Savio ni Kranz recomiendan los pesticidas químicos; en su lugar, utilizan chorros de agua para desalojar las plagas como los áfidos o un spray hecho con aceite de neem, un pesticida natural. Si la infestación es realmente mala, no se ponga sentimental. Sólo saque las plantas infectadas, dicen, y comience de nuevo.

Como todo lo que vale la pena en la vida, siempre hay otro día.

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