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UNAM destaca relevancia de investigación ganadora del Nobel para diagnósticos

Los llamados genes reloj de las células del cuerpo humano se convierten, a la luz de una investigación ganadora del Premio Nobel de Medicina 2017, en un factor clave para los profesionales de la salud al realizar un diagnóstico, destacó hoy la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Estos genes son los encargados de regular cada una de las células del organismo, ya que sin ellos “las células se vuelven poco eficientes, se enferman, se reparan mal y acumulan grasas o lípidos”, no sabiendo cuándo realizar su actividad, detalla el comunicado de la institución.

Con gran precisión estos relojes internos permiten mantener al ser humano despierto y atento y marcar los ciclos de digestión, la producción de hormonas y el funcionamiento de cada una de las células del cuerpo.

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El descubrimiento parte de la investigación de los estadounidenses Jeffrey C. Hall, Michael W. Young y Michael Rosbash sobre la relación del ciclo circadiano con las adicciones y el cáncer, galardonada hoy con el Premio Nobel de Medicina 2017.

La jefa de la sección académica de investigación de la Facultad de Medicina de la UNAM, Carolina Escobar Briones, explicó que los estudios estadounidenses “han impactado en la forma en cómo se estudia la salud en la actualidad”.

“Probaron que alteraciones en el ciclo día y noche (circadiano) de las células pueden desencadenar problemas como el cáncer”, afirmó.

A esto, la investigadora agregó que “si una célula tiene alteraciones en sus genes reloj puede dividirse mal y generar tumores”.

“El cáncer, por ejemplo, es una de las enfermedades que más preocupa y se ha demostrado que presenta una desregulación de los genes reloj”, aseguró.

La doctora explicó que el profesional de la salud “tiene que tomar en cuenta estas alteraciones para reconocer que los tratamientos deben ser diferentes si se dan de día o de noche”.

Esto determina que, en función del horario, el ser humano se comporta de manera diferente y su organismo procesa los estímulos en función de esto.

Los genes reloj pueden verse alterados por los cambios en los hábitos alimenticios, dormir muy tarde o levantarse muy temprano o la ausencia total de sueño.

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