Latinos y mujeres rechazan a Trump en las primarias de California

Dos grupos de votantes de California -mujeres y latinos- han impulsado el ascenso del partido demócrata aquí y le han dado un golpe casi mortal al partido republicano estatal.

Una encuesta de USC Dornsife/Los Angeles Times publicada la semana pasada mostró que la prominencia de esos grupos también explica por qué los dos candidatos más ‘calientes’ este año no se van a llevar el estado.

A lo largo del país, los estados que han estado en juego hasta ahora, Bernie Sanders y Donald Trump han enviado un mensaje similar sobre la economía: que los tratados comerciales han diezmado los empleos en este país y que aquellos que hacen menos dinero han sido ignorados debido a que los políticos han impulsado iniciativas que benefician a los ricos y poderosos.

Los dos candidatos pueden discrepar sobre casi todo lo demás, pero sus resonantes mensajes económicos les han ganado adeptos entre los trabajadores de clase media, los que no han asistido a la universidad y aquellos en la parte baja de la escala de ingresos.

Pero en California, según lo revelado en la encuesta, Sanders y Trump no están ganando una enorme ventaja de esos votantes, o al menos es lo que se ha visto hasta ahora, previo a la todavía lejana primaria del 7 de junio.

Cuando la encuesta entrevistó a los demócratas e independientes eligibles para votar en la primaria demócrata, Hillary Clinton ganó el 45% de aquellos que ganan menos de $50,000 al año, y el 46% de aquellos que ganan $50,000 o más al año. Sanders obtuvo el 39% de quienes ganan menos de $50,000 por año, y el 38% de los que obtienen $50,000 o más.

Entre los republicanos, Trump ganó el 38% en cada categoría de ingresos. Su principal rival, el senador de Texas Ted Cruz, se llevó el 28 % de los que obtuvieron menos de $50,000 y el 32% de los que ganaron más. El gobernador de Ohio, John Kasich, el tercer candidato todavía en la pelea, obtuvo el 13 % de ambos grupos.

En general, los blancos constituyen un poco más de la mitad de votantes que generan menos de $50,000, pero dos terceras partes de aquellos que ganan más de eso. Los latinos constituyen más de un tercio de aquellos que ganan menos de $50,000, pero sólo el 16 % de los que ganan más de eso. Las mujeres, como los latinos, están desproporcionadamente en el grupo de bajos ingresos.

Los votantes blancos de la clase trabajadora han sido los partidarios más apasionados de Trump. Pero en California, el 57 % de votantes blancos de clase trabajadora son mujeres, quiénes como grupo no han abrazado a Trump de la forma en que los hombres lo han hecho.

Y la baja en las preferencias por Trump entre la clase trabajadora en una hipotética elección general contra la puntera demócrata Hillary Clinton, también se refleja en los números. Entre los votantes blancos de clase trabajadora, Clinton supera a Trump por 12 puntos porcentuales, no mucho menos que la diferencia de 18 puntos entre votantes blancos con ingresos más altos.

En las elecciones primarias demócratas que se han sostenido hasta ahora, Clinton ha persuadido a los votantes más ricos y más cultos, y Sanders ha triunfado por enorme margen entre los votantes más jóvenes y mal pagados. En California, ella está perdiendo a los votantes menores de 50 años por 15 puntos.

Pero entre votantes de clase media, ella está venciendo a Sanders por 6 puntos porque muchos de esos votantes aquí son los latinos y mujeres, dos grupos con los cuales Clinton tiene relaciones que datan de la campaña de su marido de 1992.

Por ejemplo, entre los latinos que ganan menos de $50,000, Clinton ganó 55% contra 33%.

Los latinos con mayores ingresos se dividieron entre los candidatos. (Sus números son demasiado pequeños para medirse separadamente, pero los votantes afroamericanos y asiáticos americanos mal pagados se parecen a los latinos; juntando a todos, los votantes de minorías mal pagados apoyaron a Clinton por 15 puntos, mientras los votantes de minorías ricos se dividieron).

Si los votantes de clase trabajadora del estado fueran en su mayoría blancos, como es el caso en otros estados, los resultados habrían sido diferentes. La encuesta encontró que Clinton perdió ante Sanders por 12 puntos entre votantes blancos que ganan menos de $50,000 por año.

“Esto es otra señal del impacto que los votantes latinos están teniendo en la política de California”, dijo Dan Schnur, director del Instituto de Política Jesse M. Unruh, en USC.

El tipo de demografía de votantes de California también influye en su punto de vista en asuntos que los candidatos suelen utilizar para favorecer su causa. Uno de los asuntos con los que Trump ha atraído exitosamente a los votantes de clase media es la inmigración indocumentada. Pero los votantes aquí -incluso los blancos - están menos abiertos al mensaje de Trump de lo que lo están los votantes en otras partes.

Seis de cada 10 votantes blancos, independientemente del ingreso, desaprueban la postura de Trump sobre la inmigración indocumentada, que incluye la deportación de 11 millones de personas actualmente en el país y levantar un muro gigante para limitar los cruces en la frontera con México. Y 6 de cada 10 votantes blancos, independientemente de su ingreso, favorecen un camino a la ciudadanía para aquellos en el país ilegalmente -una posición a la que se oponen los tres candidatos republicanos restantes-.

Aunque los votantes blancos no están tan enérgicamente contra las posturas de Trump o a favor de la ciudadanía como los votantes de minoría, los números sugieren que la familiaridad con el asunto y los californianos influenciados por ello ha cambiado sus vidas. En total, el 22% de aquellos que ganan menos de $50,000 al año dijeron tener una relación “muy cercana” con alguien en el país ilegalmente, muy por arriba del 13 % de los votantes más ricos que dijeron eso.

“Si eres latino o latina, o pasas mucho tiempo con gente de otros orígenes étnicos, estás expuesto a este asunto de una forma muy diferente en California que la gente que vive en una comunidad más homogénea”, dijo Schnur.

Uno de los problemas más grandes para los republicanos que buscan expandir sus filas en California ha sido el fuerte mensaje contra la inmigración indocumentada exaltado por figuras republicanas nacionales, incluyendo este año a Trump y Cruz. El amplio apoyo aquí para un camino a la ciudadanía sugiere las dificultades que permanecen para cualquier republicano que busca un equilibrio en este diverso estado.

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