Anuncio

Las rentas en L.A. dejan a miles de familias a un paso de la indigencia

LOS ÁNGELES.- Caridad Vásquez dice vivir con el estrés a toda hora, ya que tiene menos de un mes para salirse de la casa que renta y buscar un hogar junto con sus tres hijas, un yerno y nueve nietos.

La situación se complicó desde que el dueño de la propiedad donde vive le pidió que desaloje el lugar porque quiere construir unos departamentos.

Vásquez busca vivienda en el área de Boyle Heights, pero un departamento modesto de dos recámaras le cuesta un poco más de 1,400 dólares mensuales y otros mil dólares que tiene que dejar de depósito.

Anuncio

El problema es que la familia entera no cabría, y si se separan como lo que son, cuatro familias, no podrían pagar individualmente una renta con el sueldo mínimo que gana cada una (9 dólares la hora).

Éste es el panorama que actualmente están viviendo miles de familias en la ciudad y el Condado de Los Ángeles, donde, según activistas, se necesita ganar por los menos 33 dólares por hora para alquilar un departamento y vivir dentro de los parámetros que establece la ley federal.

Salarios bajos y rentas excesivas

“Estamos viendo que existe una crisis de vivienda tremenda, lo que afecta particularmente a los latinos por ser un grupo de bajos ingresos y con sueldos suprimidos”, dice Isela Gracián, vicepresidente de operaciones de la Corporación Comunitaria del Este de L.A. (ELACC), una organización sin fines de lucro que aboga por los derechos de la comunidad.

En Los Ángeles, aproximadamente el 52% de la población alquila un hogar y gasta hasta el 47% de su salario mensual para cubrir el pago, indica un estudio de UCLA Luskin School of Public Affairs, dado a conocer el año pasado.

En resumen, el estudio subraya que se necesita ganar un promedio de 33 dólares por hora para rentar un apartamento de dos recámaras.

La situación en el Condado de Los Ángeles es similar, ya que cuenta con una población de 465,985 arrendatarios de un poco más de 10 millones de habitantes.

De estos inquilinos, más del 50% son ancianos o personas con deshabilidades que ganan menos del salario promedio, indica California Housing Partnership Corporation, una organización que aboga por la vivienda accesible.

De acuerdo a las organizaciones, el costo de alquiler aumenta en respuesta a la demanda. Desde el 2006, más de 143 mil familias se han convertido en arrendatarios, en mayor parte debido al desplazamiento durante la crisis hipotecaria, señala la organización.

“La presión es grande para las personas de bajos recursos, ya que para un presupuesto saludable sólo se debe dar el 30% de tu salario hacia la renta. Y por supuesto, cuando usamos más de este porcentaje, tenemos que cortar otros gastos de salud, educación y hasta comida”, dice Gracián.

Evidentemente, la comunidad no cuenta con empleos de licenciados, doctores, maestros o ingenieros para vivir sin la preocupación mensual del pago de la renta, señala la vicepresidenta. En California, el salario mínimo es de 9 dólares, casi 19 mil dólares al año.

“Cuando no puedes pagar una vivienda, lo único que puedes hacer es compartir los gastos con otros adultos o corres el riesgo de quedarte en la calle”, asevera Gracián.

Techo o indigencia

Actualmente, en el Condado de Los Ángeles existen unos 39,400 hombres, mujeres y niños en riesgo de quedar en la indigencia, y una de cada nueve personas sin hogar es veterana.

Para “Arturo”, un indigente que no quiso dar su nombre, la renta elevada fue la razón por la que hace unas semanas se quedó en la calle.

“Pagaba 300 dólares por un cuarto, pero siempre se necesita dinero para otros gastos”, dice el joven de 23 años de edad, inmigrante de México. “Yo trabajo en una fábrica y no tengo documentos en el país, así que gano poco y con eso no me alcanza”.

Con más de un mes en la calle, Arturo dice sentirse triste porque su familia en el estado de Guadalajara piensa que él está bien en este país.

“Yo llamo a mis padres y les digo que todo está bajo control. No hay nada más que pueda hacer. Si les digo la verdad, se preocuparían mucho”, agrega el joven, que duerme en un parque.

El problema

Aparte de que el costo de las rentas se ha incrementado hasta un 25% en los últimos 15 años, el recorte de presupuesto en los fondos federales y la desaparición de la Agencia de Desarrollo para la construcción de viviendas económicas en el 2012 han dejado fondos muy bajos para ofrecer más ayuda.

El resultado de estos recortes se traduce en unas 2,500 familias que dejaron de recibir asistencia en la ciudad, indica Annie Kim, vocera del Departamento de Vivienda en la ciudad de Los Ángeles.

Asimismo, los fondos locales no son suficientes para cubrir la necesidad. Un ejemplo de esto es el programa Sección 8. Según Kim, el número de personas que actualmente se benefician de esta ayuda es de 45,340. Sin embargo, existen unas 8,437 en la lista de espera.

Las estadísticas son menos alentadoras en el condado; aquí, el programa de ayuda asiste a unas 23,180 familias. No obstante, 42,883 se encuentran en la lista de espera, de acuerdo a la Autoridad de Vivienda del Condado de Los Ángeles.

Con la eliminación de fondos, el condado ha perdido anualmente más de 250 millones de dólares en construcción de vivienda económica.

La lucha

En la ciudad de Los Ángeles, el concejal Gil Cedillo trabaja en una resolución para monitorear de cerca los recursos federales asignados a esta comunidad.

“Podríamos perder hasta 15 mil unidades de vivienda accesible en los próximos cinco años. Nos estamos enfrentando a una escasez de vivienda mientras las rentas siguen aumentado”, dice Cedillo.

Como una luz al fin del túnel, la ciudad está considerando aumentar el salario mínimo a $13.25 para el 2017 y a $15.25 por hora para el 2019. Aún así, esto no le ayudaría mucho a los arrendatarios.

En tanto, para el Condado de Los Ángeles, la solución a la vivienda económica está en el Congreso.

“Ahora que el condado se ha ganado la distinción notoria de ser la región menos asequible en la nación, esta crisis va a empeorar más aún si el Congreso no restaura los fondos [al desarrollo de viviendas]”, señala Emilio Salas, director ejecutivo de la Autoridad de Vivienda del Condado de Los Ángeles.

Predicciones del mercado inmobiliario

Condado de L.A.

Se calcula que el alquiler promedio en el Condado de Los Ángeles aumentará un 8.2% en junio de 2016. Santa Mónica y Marina del Rey tienen las rentas más altas: $2,618. Mientras tanto, el Valle del Antílope tiene las rentas más bajas: unos $829.

Condado de Orange

Se espera un aumento en rentas de 8.6% en junio del 2016. Actualmente, la renta promedio de Newport Beach es de $2,223 dólares, la más alta en el condado de Orange, mientras que 1,300 dólares es el alquiler promedio de Anaheim.

Inland Empire

Se espera un aumento de un 9.9% en junio de 2016. Este año, los inquilinos en Rancho Cucamonga/Upland pagaron el alquiler más alto, $ 1,384, mientras que los inquilinos de Victorville/San Bernardino pagaron el más bajo, $797.

Fuente: UCLA Luskin School of Public Affairs

Anuncio