Anuncio

Ximena Sariñana, al mando de las riendas

LOS ANGELES.- El disco que lanza el 14 de abril no es uno más para ella, ya que se trata no sólo del que le permite regresar al español que dejó durante varios años, sino también del que afianza su estadía en México tras varios años de residencia en los Estados Unidos.

“Olvídate de la parte del idioma, que es lo de menos; para mí era súper importante hacer un disco en el que me involucrara no sólo en el área de la composición, como lo he hecho siempre, sino también en la producción”, le dijo la cantante a HOY Los Ángeles a través de una conexión telefónica con Ciudad de México. “Me interesaba definir en el proceso cuál es mi sonido, y un tercer disco es fundamental en ese aspecto”.

No puede hacer sido fácil, porque la placa, que se titula “No todo lo puedes dar”, tiene una gran diversidad de sonidos y de fusiones que requirieron sin duda de mucha planificación. “Fue muy trabajoso, pero me salí con la mía, me representa al 100 por ciento”, reconoció ella. “En el primero álbum [‘Mediocre’, del 2008] tuve la ayuda de muchos, porque no sabía nada de esto; el segundo [titulado como ella, lanzado en el 2011 y completamente en inglés] me enfrentó a un mercado completamente diferente y me obligó a ponerme a la altura de artistas de talla internacional, porque trabajé con productores que habían colaborado con artistas que yo escuchaba cuando era niña; y en éste, finalmente, me sentí lista para tomar las riendas, para ser capitán de mi propio barco”.

Anuncio

Cuando empezó en la música, Ximena tenía mucho que probar, porque hasta el momento era conocida como únicamente como actriz de telenovelas y películas y como hija del popular director de cine Fernando Sariñana. “Me pasó algo a sí en el disco de debut, pero aquí fue lo contrario; a la única persona a la que me interesaba probarle algo era a mí misma”, afirmó. “Como soy tan versátil, se me facilita hacer cosas en muchos géneros, y al final descubrí que lo que necesitaba hacer era un pop alternativo, por llamarlo de algún modo”.

Ella misma admite que la parte más difícil fue volver a hacer letras en español. “Los idiomas son como un músculo, y como antes de esto hice cerca de 45 canciones en inglés, cuando quise regresar [a nuestro idioma] no me salía nada”, afirmó. “Pero como pasa con todo, empezó a funcionar con la práctica”.

Otro detalle que no hay que pasar por alto es que ella misma se encuentra ahora de regreso en su país de origen. “Soy mucho de hacer las cosas que te cuestan trabajo, aunque eso también dependió de situaciones que la vida te va poniendo”, nos dijo sin ofrecer mayores detalles. “Cuando me fui [de México], no era capaz de ver las cosas buenas que allí existían; estaba cansada del DF, una ciudad que te come viva si no la tomas por los cuernos, por lo que me mudé a Guadalajara y después a Los Ángeles, donde permanecí tres años, aunque ya había vivido ahí de chiquita”.

“Pero ahora me he dado cuenta de que ésta [la Ciudad de México] es una ciudad viva, que tiene ganas de hacer cosas, donde hay espacio para todos y shows todos los días”, agregó. “Y siento que mi generación está conformada por gente que quiere transformar el país desde adentro, que está familiarizada con lo que está sucediendo y que no quiere caer en la misma fuga de talentos del pasado”.

En ese sentido, Ximena, que manifestó recientemente su rechazo al gobierno de Enrique Peña Nieto pese a que sus letras no han sido nunca políticas (“sería muy difícil estar de acuerdo con él”, nos dijo ahora), usó las redes sociales para dar a conocer su descontento con los informes difundidos incluso por grandes medios de comunicación sobre su posible parentesco con la Primera Dama Angélica Rivera, debido a que su madre Carolina Rivera se llama igual que la hermana de ésta.

“Es una casualidad de nombres; por desgracia, compartimos el mismo apellido, pero aquí en México los Rivera son como los González, es decir, muchísimos”, precisó. “Lo peor de todo es que la gente no investiga bien sus fuentes; cada quien hace su trabajo como lo quiere hacer, pero me parece lamentable que ni siquiera se tomen el trabajo de corroborar sus datos”.

Como Ximena nos dijo que este disco es muy personal y sabemos que hace unos meses concluyó su relación sentimental con Omar Rodríguez López, exguitarrista de The Mars Volta, le preguntamos si el sencillo “Ruptura” alude a la situación.

“No; realmente, no hay ninguna canción que habla de eso. La única que podría referirse a él es ‘La vida no es fácil’, porque él siempre me lo decía”, precisó. “La verdad es que mis temas en general no hablan de una persona en particular, sino de sentimientos que vienen de distintos momentos de mi vida o incluso de distintas personas”.

“Es chistoso, porque ‘Ruptura’ es una canción que no escogí yo, sino Mario [Domm], con quien estuve escribiendo; cuando le comenté que estaba pasando por una crisis en la que la música me estaba saliendo increíble pero sufría con las letras, me recomendó que compusiera una sobre las dificultades de olvidar a alguien, es decir, algo con lo que cualquiera se podría identificar”, agregó.

Cuando le señalamos que colaborar con el integrante de Camila es algo que sus fans más ‘alternativos’ probablemente no celebrarán, Ximena no se amilanó. “Soy de una de las artistas que menos se ha dejado encasillar; puedo hacer cumbia con Los Ángeles Azules, cantar pop con Bosé, subirme al escenario del Vive Latino o irme de gira con Juanes sin ningún problema”, enfatizó. “Y eso es algo que atesoro. El encasillamiento me parece ridículo”.

Sus próximas presentaciones en nuestra ciudad serán justamente como acto de apertura de Juanes en el Nokia, el 31 de julio y el 1ro de agosto. “Juanes me encanta como artista; me siento muy bien de que me haya invitado y estoy súper emocionada porque eso me va a permitir tocar en lugares donde nunca me hubiera imaginado tocar”, comentó la joven, que estará presente en 13 conciertos del colombiano dentro de la Unión Americana.

Anuncio