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Fauci y otros dos miembros del equipo de respuesta al coronavirus de la Casa Blanca se ponen en cuarentena

Dr. Anthony Fauci
El Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, aparece en la Casa Blanca el 1 de abril.
(Alex Brandon / Associated Press)

Tres miembros del equipo de respuesta al coronavirus de la Casa Blanca, entre ellos el doctor Anthony Fauci, se han puesto en cuarentena porque estuvieron en contacto con una persona a la que le detectaron COVID-19, otro crudo recordatorio de que ni siquiera uno de los inmuebles más seguros de la nación es inmune a los contagios.

Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas y uno de los miembros prominentes de ese equipo especial, ha adquirido notoriedad nacional por sus explicaciones sencillas y directas al público sobre el coronavirus y la enfermedad resultante, el COVID-19. También adoptaron la misma medida el doctor Robert Redfield, director de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), y Stephen Hahn, comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés).

El instituto que dirige Fauci reveló que el funcionario dio negativo al contagio y continuará siendo examinado con regularidad. Señaló que la situación de Fauci es considerada de “relativamente bajo riesgo” debido a su grado de exposición, y que él “adoptará las medidas apropiadas de precaución” para reducir el riesgo de contactos personales mientras cumple con sus obligaciones. Aunque Fauci permanecerá en casa y trabajará a distancia se presentará a la Casa Blanca si se lo solicitan y se adoptarán las medidas necesarias, sergún el instituto.

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Redfield estará “trabajando a distancia las próximas dos semanas” después de determinarse que tuvo una “exposición de bajo riesgo” con una persona en la Casa Blanca, manifestaron los CDC en un comunicado emitido el sábado en la noche. Redfield se siente bien y no tiene síntomas, según el comunicado.

Pocas horas antes, la FDA confirmó que su titular, Hahn se puso en cuarentena para las próximas dos semanas después de estar en contacto con una persona a la que detectaron la infección. Hahn dio negativo en los exámenes.

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Los tres funcionarios tenían previsto testificar el martes ante una comisión del Senado. El senador republicano Lamar Alexander, presidente de la comisión, permitirá a Redfield y Hahn testificar por videoconferencia, una excepción a las políticas de la administración para presentar testimonios. La declaración fue emitida antes de que fuera anunciada la cuarentena de Fauci.

El secretario de prensa del vicepresidente Mike Pence dio positivo el viernes y se convirtió en la segunda persona que trabaja en el complejo de la Casa Blanca cuyo contagio se conoció esta semana. Funcionarios de la Casa Blanca confirmaron el jueves que el día anterior le detectaron la infección a uno de los asistentes de Trump, un elemento de las fuerzas armadas.

El presidente Trump, quien identificó públicamente a la asistente de Pence afectada como la portavoz Katie Miller, dijo que “no estaba preocupado” por la propagación del virus en la Casa Blanca. No obstante, los funcionarios dijeron que se encontraban intensificando los protocolos de seguridad para el complejo presidencial.

Miller había estado en contacto reciente con Pence pero no con el presidente y había dado negativo un día antes. Está casada con Stephen Miller, uno de los principales asesores de Trump. La Casa Blanca no hizo comentarios inmediatos sobre si Stephen Miller había sido evaluado o si todavía estaba trabajando en la Casa Blanca.

Los CDC y la FDA no revelarán la identidad de la persona que dio positivo y con quien los líderes de la agencia se pusieron en contacto.

Redfield buscó usar el contagio como un momento de enseñanza. La declaración de los CDC dice que si debe ir a la Casa Blanca para cumplir con cualquier responsabilidad como parte de la fuerza de trabajo del coronavirus, seguirá los consejos de los CDC para los integrantes. Esas pautas exigen que Redfield y cualquier persona que labore en el grupo de trabajo se tome la temperatura y se evalúen los síntomas todos los días, se cubran la cara y se alejen de los demás.

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Trump se resistió a usar una mascarilla, y en una reunión con los principales líderes militares de la nación el sábado por la noche, no utilizó una durante el corto lapso que los reporteros pudieron ver. Los generales alrededor de Trump tampoco usaban una pero los participantes se sentaron a unos cuantos pies uno del otro.

La portavoz de la FDA, Stephanie Caccomo, reveló que Hahn dio negativo para el virus después de enterarse del contacto. Escribió una nota al personal el viernes para alertarlos.

Seis personas que habían estado en contacto con Miller tenían previsto volar con Pence el viernes a Des Moines en Air Force Two. Fueron retirados del vuelo justo antes de que despegara, según un alto funcionario de la administración.

Ninguna de esas personas mostró síntomas, pero a todos se les pidió que bajaran para que pudieran ser evaluados “por precaución”, expuso un alto funcionario de la administración a periodistas que viajaban con Pence. Los seis más tarde dieron negativo, informó la Casa Blanca.

El funcionario dijo que el personal en el ala oeste se evalúa regularmente, pero gran parte del personal de Pence, que trabaja al lado en el edificio de la Oficina Ejecutiva, se realiza evaluaciones con menos frecuencia. Katie Miller no estaba en el avión y no había sido programada para realizar el viaje.

Pence, que se evalúa regularmente, fue examinado el viernes. Miller tuiteó que estaba “bien” y esperaba volver a trabajar.

El jefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, dijo que la administración estaba intensificando los esfuerzos de mitigación ya recomendados por expertos en salud pública y tomando otras precauciones no especificadas para garantizar la seguridad del presidente. Agregó que la Casa Blanca era “probablemente el lugar más seguro al que puedes llegar”, pero que se encontraba revisando los pasos adicionales para mantener a salvo a Trump y Pence.

La Casa Blanca requiere controles diarios de temperatura de cualquier persona que ingrese al complejo y ha alentado el distanciamiento social entre los que laboran en el edificio. La administración también ha realizado regularmente una limpieza profunda de todos los espacios de trabajo. Cualquier individuo que se acerque al presidente y al vicepresidente se somete a pruebas diarias de COVID-19.

El caso del asistente de Trump marcó el primero conocido en el que una persona que estuvo cerca del presidente dio positivo desde que varios individuos presentes en su club privado de Florida fueron diagnosticadas con COVID-19 a principios de marzo.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

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