Anuncio

Depuran cientos de nombres de la lista de pandillas en el condado

SAN DIEGO UNION-TRIBUNE

La fiscal del distrito del condado de San Diego eliminó de la lista de pandillas, a cientos de personas que por años tuvieron que vivir con restricciones en cuanto a con quién interactuar, qué vestir o a dónde poder ir, todo bajo el mandato de pandillas establecido en ciudades de todo el condado.

En una conferencia de prensa reciente, la fiscal Summer Stephan anunció que su oficina removió a 332 personas de la base que contiene nombres con órdenes para pandillas, las cuales habían sido incorporadas en las últimas dos décadas. Eso equivale al 42 por ciento de las 799 personas presentadas ante la corte y aprobadas por la misma para estar en la lista desde 1997.

Para aquellos cuyos nombres se incluyeron en las órdenes de la corte, la eliminación de esa lista es un evento significativo que puede cambiarles la vida. Los mandatos de pandillas, que siguen vigentes para cientos de otros presuntos miembros de estos grupos, son de por vida y han impedido que las personas que dejaron atrás sus días de delincuencia callejera obtengan empleos, viviendas o simplemente un lugar dentro de su comunidad, señaló Stephan.

Anuncio

El movimiento para auditar y depurar la lista se inició después de que la oficina escuchó a miembros de las comunidades donde existen las órdenes de pandillas y donde muchos de ellos residen o tienen familias. El primer impulso serio se produjo hace más de dos años en una reunión de la Comisión de Prevención e Intervención de Pandillas de San Diego, en la que los miembros del público expresaron su preocupación por las personas que habían respetado la ley, pero que permanecían bajo la sombra de la orden de la corte.

“Lo que escuchamos de ellos fue que había personas que merecían una segunda oportunidad”, indicó Stephan.

Desde 1997, la Oficina del Fiscal del Distrito ha colocado 20 mandatos de la corte dirigidos contra 12 pandillas en seis ciudades: San Diego, Escondido, National City, Oceanside, San Marcos y Vista. Por lo general, los mandatos, que son órdenes civiles de la corte, se dirigen a los individuos por su nombre y les impiden hacer una serie de cosas en un área designada.

Las condiciones de los mandatos a menudo incluyen la prohibición de salir con otros miembros de pandillas, mostrar signos de pandillas y usar ropa asociada con pandillas en particular. Ser atrapado en una zona bajo un mandato de la corte puede conducir a un arresto.

La medida ha sido controversial desde que se usó por primera vez, ya que los críticos argumentan que le da mucha discreción a la policía y que se aplica de manera muy amplia. Pero las cortes han mantenido la práctica, y la policía ha dicho que los mandatos de la corte pueden ayudar a frenar los delitos de pandillas en cierta área.

El uso de estos mandatos ha disminuido en los últimos años. La última orden de pandilla emitida en el condado de San Diego fue hace ocho años.

Los líderes comunitarios en la conferencia de prensa dieron la bienvenida al movimiento para depurar nombres de la lista.

“Este es un gran día en San Diego”, expresó el reverendo Gerald Brown, miembro de la Junta Consultiva de San Diego sobre Policía y Relaciones Comunitarias y director ejecutivo del Consejo Ministerial Afroamericano de Estados Unidos. “No solo es que se haya eliminado a 330 miembros del mandato de pandillas, sino que la acción representa que 330 familias tienen la oportunidad de ver a sus padres avanzar”.

Stephan explicó que para ser sacado de la medida cautelar los individuos tenían que cumplir con tres criterios: no tener ninguna condena por un delito grave violento en la última década, haber estado libre de custodia o condena penal durante los últimos cinco años y no tener ninguna acción que demuestre lealtad o membresía en una pandilla durante los últimos cinco años.

Después de determinar quién calificaba, los fiscales presentaron mociones ante la corte pidiendo a un juez, en la medida de lo posible al que había emitido la orden, que eliminara el nombre.

Ningún juez se negó.

Mientras tanto, la oficina envió cartas a las personas informándoles que habían sido retiradas de la lista y que se tenía la expectativa de que pudieran “avanzar como ciudadanos productivos en nuestra comunidad”. Las cartas también advertían que de volver a la actividad de pandillas podría significar que su nombre fuera agregado nuevamente a la lista.

San Diego no es el primer condado que recorta las listas de mandatos de pandillas. En Los Ángeles miles de nombres han sido eliminados de los mandatos judiciales desde 2017. El uso de estos mandatos de la corte estaba más extendido allí: desde el año 2000 se habían colocado 79 mandamientos judiciales a casi 9 mil miembros de pandillas.

La acción de revisar y borrar nombres de la lista es parte de un movimiento más amplio de reforma en el sistema de justicia penal que incluye el concepto de justicia restaurativa, un concepto que a grandes rasgos hace hincapié en la rehabilitación y la reparación de los daños causados por un comportamiento delictivo para el individuo y la comunidad, por encima de un castigo.

De acuerdo con un comunicado de prensa de la Oficina del Fiscal de Distrito, de los 332 nombres eliminados, 66 personas fueron sacadas porque cumplen condenas de cadena perpetua, fallecieron o aparentemente han abandonado por completo la vida de pandillas o el condado.

Stephan aclaró que la eliminación de tantos nombres no debe considerarse como una validación de la añeja crítica hacia estos mandatos judiciales, que decía que fueron muy amplios, que arrasaron con demasiadas personas y que fueron una exageración de la autoridad fiscal.

Señaló que en el momento en que se establecieron los mandatos de pandillas, los investigadores, para convencer a un juez, reunieron información sobre cada persona que mostraba sus conexiones con pandillas y la razón por la que deberían incluirse, y fue precisamente un juez quien finalmente aprobó tal orden. También dijo que los mandatos de pandillas han tenido un impacto positivo y fueron una de las muchas herramientas que los fiscales utilizaron contra las pandillas callejeras.

Stephan también señaló que sigue existiendo en el condado un “problema continuo y grave de violencia de pandillas”. Informó que la Unidad de Pandillas de la Oficina maneja de 35 a 40 homicidios relacionados con pandillas en determinado momento.

Comentó que si bien la oficina seguía comprometida con la lucha contra la violencia de pandillas, aseveró que cada año se realizaría una auditoría y depuración para remover de la lista de mandatos de pandillas a los individuos que ahora respetan la ley.

Moran escribe para el U-T.

Anuncio