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National City investigará reclamos que involucran a concejal

National City council members, including Mona Rios and Jerry Cano (far left), at a meeting on June 6, 2017.
National City council members, including Mona Rios and Jerry Cano (far left), at a meeting on June 6, 2017.
(Nelvin C. Cepeda / San Diego Union-Tribune)
San Diego Union-Tribune

El consejo de National City votó el martes 3-1 para aprobar que el fiscal de la ciudad contrate a un bufete de abogados externo para investigar las acusaciones de que el concejal Jerry Cano recibió un trato especial al evitar multas por cometer violaciones al código.

También decidieron que la misma firma investigaría las afirmaciones que Cano hizo contra la concejala Mona Ríos.

Cano alegó que Ríos lo tocó de manera inapropiada mientras los miembros del consejo posaban para una fotografía en una reunión del 3 de abril. Hizo la acusación públicamente cerca del final de la reunión, luego de que Ríos pidiera una investigación sobre las violaciones al código de construcción de Cano.

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Durante la reunión del martes, Ríos calificó las acusaciones de Cano contra ella como una “descarada represalia”.

“Eso no debería ser lo que les sucede a los funcionarios electos que quieren transparencia”, dijo.

Cano, quien no ha presentado una queja o reclamo contra Ríos, se apartó de lo que se convertiría en una discusión tensa, y no votó sobre el asunto, a pedido del fiscal de la ciudad, Angil Morris-Jones. El concejal se negó a hacer comentarios después de la reunión de una hora de duración, que terminó después de la medianoche.

El alcalde Ron Morrison detuvo dos veces la reunión ya que un pequeño grupo de personas de la comunidad gritaron e hicieron ruido por los comentarios del alcalde, antes y después de la votación. En un momento dado, Morris-Jones solicitó hablar con los integrantes del consejo municipal a puertas cerradas durante unos cinco minutos.

La votación dividida se produjo después de que casi una docena de miembros de la comunidad denunciaron las violaciones al código de construcción de Cano y exhortaron al consejo municipal a autorizar una investigación externa. Algunos residentes dijeron que las violaciones de Cano afectan poco a la ciudad, mientras que otros dijeron que votar en contra de una investigación implicaría que la ciudad quiere ocultar la verdad.

El único voto en contra de la investigación externa provino de Morrison. Antes de la votación, Morrison dijo que sería injusto investigar a Cano sin evidencia para respaldar los reclamos contra el concejal.

Morris-Jones le recordó al Ayuntamiento que hay hechos contra Cano: 14 violaciones al código de construcción que la ciudad emitió contra él hace cinco años, que Cano no ha discutido.

En el caso de Cano, la ciudad no lo multó durante los últimos cinco años a pesar de no haber podido corregir las violaciones del código de construcción, que se derivan de renovaciones exteriores realizadas en su casa en la calle Mary Lane sin los permisos correspondientes.

Morris-Jones estimó que la investigación costará entre 30 mil y 40 mil dólares. Agregó que tiene un abogado experimentado en mente, pero no reveló su nombre.

Hernández escribe para el U-T.

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