Columna: Bienvenido de nuevo, Super Bowl. L.A. es el lugar al que perteneces
El Super Bowl finalmente está de regreso donde pertenece para jugarse en Los Ángeles. Su lugar de nacimiento y otros momentos memorables, escribe el columnista Bill Plaschke.
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¡Hola, Super Bowl!
Bienvenido a casa.
Hola a la gran fiesta nacional disfrazada de partido de futbol americano.
Me alegro de tenerte de regreso.
Naciste en Los Ángeles. Creciste aquí. Nunca debiste irte de aquí. Perteneces a este lugar.
Pasaste siete ocasiones diferentes aquí, alguna vez en el Coliseo, alguna vez en el Rose Bowl, siempre Hollywood. Fue aquí donde estableciste un récord de asistencia. Fue aquí donde viste al quarterback de los Gigantes de Nueva York, Phil Simms, convertirse en la primera persona en gritar “Me voy a Disney World”. Y, sí, por supuesto fue aquí donde Michael Jackson realizó un espectáculo de medio tiempo.
Bienvenidos, bienvenidos, pasen. Sabemos que ahora es diferente, lo entendemos. Pero guarden esas entradas de $10.000 y los pases de fiesta dorados por un segundo y pónganse cómodos. Te hemos echado mucho de menos.
Esta fiesta fue creada en el Coliseo hace 55 años, dos años antes de que se le llamara realmente Super Bowl, mucho antes de que el mundo de Twitter hubiera arrasado con aquellos dos tipos que volaban por aquel primer partido llevando mochilas propulsoras.
Super Bowl: fuimos los primeros en quererte. Aunque hubiera unos 30.000 asientos vacíos en tu debut entre los Packers de Green Bay y los Chiefs de Kansas City. Te dimos el mejor clima futbolístico que podemos convocar, 59 grados y despejado. Nos diste el medio tiempo con Al Hirt. No nos quejamos.
Volviste seis años más tarde, cuando los Dolphins de Miami asaltaban el mismo campo del Coliseo para celebrar la última temporada invicta de la NFL. A continuación, se trasladó al Rose Bowl cinco veces en los siguientes 17 años, en partidos que ofrecieron momentos icónicos como John Madden acechando en la banda, John Riggins asaltando el campo, el primer baño de Gatorade celebrado a nivel nacional después del partido y un Jimmy Johnson con el pelo desordenado gritando: “¡Qué tal los Cowboys!”.
Aquí la información del juego que no te puedes perder entre los Rams y los Bengals. El partido se realizará en casa de los Rams en el SoFi Stadium.
Nos preguntamos, ¿qué tal si Los Ángeles es una de las sedes rotativas del Super Bowl? Nos preguntamos, ¿qué tan perfecto sería ser sede de este juego cada dos años?
Nos lo hemos ganado. Nos lo merecemos. Los Rams fueron el primer equipo de la NFL de la Costa Oeste. Los Rams fueron el primer equipo de la NFL en emplear a un jugador negro, Kenny Washington firmando un contrato ante la insistencia del Coliseo. Los Rams fueron también el primer equipo en tener un quarterback negro como titular y en ganar un partido de playoffs de la NFL, gracias a James Harris.
Los Ángeles era la plaza de la NFL más inteligente y sofisticada y, después de esas primeras siete visitas, su partido más importante debería haber echado raíces aquí.
Pero entonces, tú, tonto Super Bowl, nos dejaste tirados.
La NFL se fue de la ciudad y tú también, desapareciendo en el invierno de 1993 y no regresaste durante 29 largos años, ¿cómo pudiste hacernos esto?
Te fuiste a Jacksonville, sí, allí hay algo que parece un estadio. Fuiste a Detroit, donde la temperatura fuera del recinto de Ford Field era de 30 grados. Fuiste a Nueva York, y no fue un desastre. Fuiste a Indianápolis, tan aburrido. Fuiste a Minneapolis, donde este intrépido columnista casi se congelaba esperando un Uber.
Te fuiste por todo el país cuando tu hogar legítimo era aquí. Entonces la NFL volvió a Los Ángeles en 2016, el dueño de los Rams, Stan Kroenke, se gastó $5.000 millones para construir el SoFi Stadium, lo inauguró en 2020 y, por fin, entraste en razón.
Por fin, volviste.
El Super Bowl LVI se jugará en el SoFi Stadium el 13 de febrero, víspera de San Valentín, y no es que te lo merezcas, pero vaya carta de amor que hemos escrito.
Los Rams es apenas la segunda escuadra que juega un Super Bowl en su casa, la manifestación de la inversión de Kroenke, un mariscal de campo estrella llamado Matthew Stafford rodeado de un grupo glamoroso y ricamente pagado digno de nuestras luces más brillantes – Sunset Boulevard se encuentra con la Zona Roja.
Los Bengals de Cincinnati son el equipo opuesto, los molestos “underdogs”, un quarterback infantil llamado Joe Burrow rodeado de cascos a rayas en su mayoría anónimos y un pintoresco grito de ánimo que dice: “¡Quién, quién, quién cree que va a vencer a los Bengals... nadie!”.
Algunos creen que ese grito fue robado a los Saints de Nueva Orleans, otros piensan que vino de un vendedor de cerveza local de Cincinnati, pero no importa, será un digno competidor del grito de los Rams, “¿La casa de quién? La casa de los Rams”.
En consonancia con las tradiciones del Super Bowl de esta ciudad, el partido presenta al menos una destacada primicia. Los Rams de Los Ángeles nunca han ganado un Super Bowl. Tampoco lo han hecho los Bengals. Los ganadores probablemente llorarán y los perdedores posiblemente también. El típico histrionismo de una tarde de domingo en Los Ángeles que parecerá una audición de película.
Esto es por lo que emociona que hayas vuelto Super Bowl. Esta ciudad con alma se adapta a ti. Su emoción palpitante te sienta bien. Es quizá el único lugar en Estados Unidos que no es demasiado chico para ti.
Por supuesto, hace un tiempo que no te vemos, y aunque seguramente estarás familiarizado con el dramatismo, puede que no reconozcas el lugar.
El Coliseo es bonito, pero ahora es casa del tercer equipo de futbol americano profesional de la ciudad, conocido como USC. El Rose Bowl es histórico, pero es el dominio de un equipo de UCLA que nadie ve.
El SoFi Stadium es un animal totalmente diferente, es una gran belleza, pero es una bestia. Es un palacio grandioso con un tablero de video impresionante, pero está situado en una esquina desordenada de Inglewood donde el tráfico es un infierno y el estacionamiento es peor.
Hay que llegar con cuatro horas de antelación y estar preparado para pagar el alquiler de un mes por un sitio de estacionamiento e incluso así, podría tardar casi toda la noche en salir ahí. El caos posterior al partido es tan grande que hay historias de personas que han asistido a los partidos nocturnos de los Rams o los Chargers que simplemente abandonaron sus autos, durmieron en un motel local y condujeron a casa a la mañana siguiente.
No es que estés aquí solo por el juego. De hecho, desde que te fuiste, te has convertido en un vehículo para mucho más que el futbol americano. Las fiestas son las verdaderas entrañas del Super Bowl, y para eso, obviamente, has venido al lugar adecuado.
Desde el Centro de Convenciones hasta el Crypto.com Arena, pasando por el Century Park y el Petersen Automotive Museum, el fin de semana estará repleto de bebida, baile y de descarados “desenmascarados”. Si las multitudes de los últimos eventos deportivos de Los Ángeles son un indicio, un número alarmante de aficionados ignoran las reglas de uso de las mascarillas, incluidos el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, y el gobernador Gavin Newsom, que fueron fotografiados sin cubrebocas en el reciente partido del campeonato de la NFC.
Así que tengan cuidado. No se arriesguen. Y si tienen que salir de fiesta, quizá pueda ir a la celebración que personifica la mezcla de las culturas del deporte y de los famosos de Los Ángeles. Se llama “Shaq’s Fun House”. Se celebra el viernes por la noche antes del partido en el Shrine Auditorium. Podría ser un timo tradicional del Super Bowl, pero como lo organiza la adorable exestrella de los Lakers Shaquille O’Neal, tal vez sea divertido. Por una entrada que podría costar hasta $1.799,99 – ¡alerta de estafa! – la gente puede asistir a una fiesta que incluye actuaciones de rap, atracciones de feria y avistamientos de casi famosos.
La última vez que estuviste aquí, Super Bowl, Shaq era un novato con los Magic de Orlando. Sí, ha pasado mucho tiempo. Has crecido y has tenido más impacto, pero también lo ha hecho el panorama deportivo de Los Ángeles.
Desde aquel día de enero de 1993 en el Rose Bowl, Los Ángeles ha añadido dos nuevos estadios, mientras que los Lakers y los Dodgers, el futbol americano de la USC y el baloncesto de la UCLA, los Kings, los Sparks, los Galaxy, los Angels y los Ducks, entre otros, han ganado campeonatos.
Mientras que el Super Bowl se ha convertido en el principal acontecimiento deportivo de Estados Unidos, Los Ángeles se ha transformado en la principal ciudad deportiva de EEUU, y las dos se pertenecen, de forma rotativa, para siempre.
Bienvenido a casa.
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