Vuelve ‘El Tráfico’, con el LAFC y el Galaxy necesitados de un fuerte impulso

El apodo de El Tráfico puesto a la rivalidad futbolística entre el Galaxy y el LAFC se inspiró en las 12 millas de atasco en la autopista que separan a los vecinos del sur de California. La etiqueta nunca ha sido tan apropiada como lo será para el partido del sábado en el Banc of California Stadium, ya que ninguno de los dos equipos ha avanzado en semanas.

El Galaxy (11-8-2) lideró brevemente la Conferencia Oeste hace dos semanas, pero ha perdido dos partidos seguidos por primera vez esta temporada y ha caído al cuarto puesto de la clasificación.

El LAFC (6-9-5) está en peor forma. Lleva cuatro derrotas consecutivas, la peor de la franquicia, y no ha ganado en cinco semanas, cayendo al noveno puesto y fuera del panorama de los playoffs. La racha de siete partidos sin ganar es también la peor de la franquicia.

Eso hace que el partido del sábado, el duodécimo del derbi interurbano, sea el primero en el que ambos equipos entran con rachas de derrotas en la temporada regular.

El portero del Galaxy, Jonathan Bond, cuyo equipo lidera la serie por 5-3-3, dijo que toda esa historia se esfuma una vez que suena el silbato.

“Un partido de rivalidad, realmente no importa si has ganado tus dos últimos partidos, perdido los dos últimos partidos o empatado”, dijo. “En estos partidos puede pasar cualquier cosa. Es un partido único y quien lo quiera más, generalmente ganará”.

Bond dijo que destacó los partidos del LAFC cuando firmó con la MLS el pasado mes de enero. Ya ha jugado en un El Tráfico, ante un público socialmente distanciado de 7.193 personas en el Dignity Health Sports Park en mayo.

El partido del sábado, ante un público que se espera que llene las entradas y que incluirá al estridente grupo de seguidores 3252 del LAFC, será diferente.

“Como que tengo muchas ganas de jugar en ese tipo de ambiente y en su estadio”, dijo. “Es un bonito reto y uno de los partidos que más esperaba”.

Bond, que pasó la primera década de su carrera en Inglaterra, dijo que los partidos de rivalidad traen consigo un enfoque y un ambiente diferentes.

“El aspecto humano entra en juego y hay mucha más emoción en el juego”, dijo. “Se encuentra ese plus de motivación. Si embotellaras lo que sientes en un partido de rivalidad y lo repitieras cada semana, serías un robot y todos los partidos serían iguales”.

Ambos equipos no podrán contar con sus principales estrellas. Javier “Chicharito” Hernández, el máximo goleador del Galaxy, no juega desde el 26 de junio por una lesión en la pantorrilla. El capitán del LAFC, Carlos Vela, salió del último partido de su equipo por una distensión en el cuádriceps. Ambos se saltaron las actividades de la MLS-Liga MX de esta semana, lo que los hace inelegibles para el sábado, aunque es poco probable que cualquiera de ellos hubiera estado disponible para la selección de todos modos.

Vela lidera el LAFC con cinco asistencias y es segundo con cinco goles, por lo que su ausencia se sentirá en un equipo que ha tenido problemas para anotar. El LAFC empató el récord de goles en una temporada de la MLS y destrozó la marca de diferencia de goles en el camino hacia el Supporters’ Shield hace dos años, pero no ha marcado más de dos veces en un partido esta temporada y ha recibido más goles de los que ha marcado.

Para el entrenador Bob Bradley, cuyo equipo sólo ha anotado un gol de jugada en el último mes, ganar un partido de rivalidad podría proporcionar la chispa para enderezar el barco.

“Para un individuo, es una gran jugada en un momento importante”, dijo. “Es que Diego [Rossi] marque un gran gol cuando realmente importa y recupere su confianza. Es hacer una jugada defensiva en el último momento del partido para asegurar la victoria. Necesitamos la jugada correcta en el momento adecuado y creo que veran a los chicos respirar más tranquilos y estar preparados para tener alguna alegría”.

“Es el Galaxy, es un derbi, la comprensión de la intensidad, la comprensión de la importancia para nuestros fans, todas esas cosas están en juego”.

El centrocampista del LAFC José Cifuentes, que se unirá a la selección de Ecuador para la clasificación de la Copa del Mundo después del partido del sábado, dijo que estaba de acuerdo.

“Sabemos que no estamos donde tenemos que estar”, dijo en español. “Pero nuestro vestuario está unido, pensando en lo que viene. Nos encantaría conseguir un buen resultado en este juego para empezar a darle la vuelta a las cosas”.

Eso sin duda, aliviará el tráfico.

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