OPINIÓN: Nunca le den oportunidades a los Royals

Hay ciertos equipos a los que simplemente no se les puede dejar vivir, y los Royals son uno de ellos.

Kansas City estaba a un juego de coronarse campeón de la Serie Mundial, luego que el sábado logró otra victoria viniendo de atrás, para adelantarse 3-1 en la serie, en la que en el Juego 5 cerraron ayer en Nueva York al ganar 7-2.

Fue el séptimo triunfo de los Royals viniendo de atrás en esta postemporada y el número 12 en playoffs contando el 2014, cuando también llegaron a la Serie Mundial.

Kansas City se asimila a los Patriots de Nueva Inglaterra y los Spurs de San Antonio en cuanto a su capacidad para venir de atrás. Son equipos a los que hay que aniquilar cuando hay esa posibilidad, porque solo necesitan de una oportunidad para revivir.

Los Mets bien podrían ser quienes estuvieran 3-1 en la serie, pero se dejaron empatar en la novena entrada del Juego 1, y terminaron perdiendo ese partido en extra innings.

Y lo mismo les pasó en el partido del sábado, cuando ganaban 3-2 en la octava entrada y un error del ahora frío Daniel Murphy (sin jonrones ni carreras producidas en la serie) les costó el empate, para que luego Mike Moustakas y Salvador Pérez pegaran sencillos productores que adelantaron 5-3 a KC, ventaja que el dominante bullpen ya no perdió.

La clave hasta ahora para los Roylas ha sido, otra vez, su bateo en el momento preciso. Los Mets dominaron a Chicago en la Serie de Campeonato porque la fortaleza neoyorquina -su pitcheo de velocidad- era el antídoto perfecto para el bateo de poder de los Cachorros.

Pero el lineup de los Reales no es de poder, sino de contacto con la pelota, algo ideal contra las rectas de más de 95 millas por hora de los pitchers metropolitanos, que han minimizado ese recurso ante su ineficiencia.

Los Roylas simplemente nunca se rinden, y por sencillo que eso parezca, no es fácil derrotar a un equipo así, y los Mets se han dando cuenta de ello de la peor forma al también perder tras ir arriba 2-0 en el Juego 5.