Las ventas de autos en California se recuperan, pero comprar un vehículo nuevo será más caro

SAN DIEGO — Tras verse afectado por la pandemia de 2020, el mercado automovilístico californiano resucitó el año pasado con un repunte de las ventas. Pero el camino que queda por recorrer sigue siendo accidentado, ya que persisten las interrupciones en la cadena de suministro mundial, lo que se traduce en un menor número de autos y camionetas en los concesionarios, lo que significa precios más altos para los clientes.

Las matrículas de vehículos nuevos en California totalizaron 1.86 millones en 2021, de acuerdo con cifras publicadas la semana pasada por la California New Car Dealers Association. Esto supone un aumento del 13.3 por ciento respecto al año anterior, cuando las ventas cayeron en picado tras la aplicación de las restricciones del COVID-19.

En el condado de San Diego, las ventas aumentaron un 16.3 por ciento.

Para tener una perspectiva, las matriculaciones de autos y camionetas nuevas superaron los 2 millones al año desde 2015 hasta 2019.

Los economistas de la asociación de concesionarios de automóviles nuevos prevén que las ventas de este año aumenten un 3.8 por ciento, hasta 1.93 millones.

Los analistas dicen que la cifra probablemente sería mayor, dada la demanda reprimida, pero el sector se ha visto obstaculizado por los problemas de suministro que han perjudicado a los transportistas de todo el mundo.

El ritmo de aumento de las ventas “ciertamente no es tan rápido como muchos de nosotros esperábamos, sobre todo por la persistencia de la variante ómicron del virus y la escasez de chips”, afirma Brian Maas, presidente de la asociación de concesionarios de autos nuevos. “Es solo que la disponibilidad del tipo de opciones a las que los consumidores están acostumbrados, no está ahí ahora mismo”.

Los vehículos modernos se componen de microchips que se instalan en los sensores de los frenos, la dirección asistida, la navegación y los sistemas de entretenimiento.

Con la economía prácticamente en suspenso al inicio de la pandemia, las ventas de autos se desplomaron. Los fabricantes de automóviles redujeron la producción de nuevos vehículos y cancelaron los pedidos de chips informáticos. Pero después de que las ventas de autos repuntaran más rápido de lo previsto en 2020, los fabricantes han batallado para volver a la delantera del mercado.

Una serie de acontecimientos —entre ellos un brote de COVID en una fábrica en Malasia, sequía en Taiwán (se necesita agua para producir los chips) y un incendio en una planta en Japón— provocaron una escasez mundial de microchips, que se agravó por los problemas de las líneas de transporte.

Como resultado, el inventario de vehículos se redujo, mientras que la demanda de los consumidores es tan alta como antes de la pandemia.

La escasez de chips “ha mermado mucho las ventas y ha disparado los precios”, afirmó Iván Drury, gerente de investigación de la compañía de reseñas automovilísticas Edmunds.com. “Es como si hubieras tomado esta minúscula ficha de dominó, la hubieras sacudido y se hubiera escurrido hacia abajo”.

Como consecuencia de la falta de inventario, es difícil comprar un auto o una camioneta nueva por debajo del precio de venta sugerido por el fabricante, o MSRP.

Según los datos rastreados por Edmunds, el 80.3 por ciento de las compras de autos nuevos en Estados Unidos en enero se vendieron por encima del MSRP. En enero de 2019, antes de la pandemia, la cifra era solo del 1 por ciento.

El precio medio por encima del MSRP el mes pasado fue de 728 dólares, con algunos modelos —incluso en las marcas que no son de lujo— viendo aumentos de miles de dólares.

“Existe una extraña dinámica en la que hay personas que están dispuestas a pagar mucho más y otras que solo buscan algo barato que les sirva para sobrevivir”, explica Drury. “El problema es que hay mucha gente buscando algo”.

La dinámica es tan pronunciada que algunos vehículos nuevos se venden sin instalar algunos de los microchips menos vitales, como los asientos con calefacción o la carga inalámbrica.

“Lo que eso me dice es lo importante que es la demanda de los consumidores”, dijo Maas. “Hace cinco años, si uno dijera: ‘Voy a comprar un auto al que le faltan chips’, habría dicho que es una locura. Pero en el entorno actual, la gente está haciendo esos cálculos y decidiendo si les conviene”.

Maas dijo que los inventarios podrían volver a los niveles anteriores a la pandemia a principios de 2023, pero Drury es más pesimista.

“Si quieres ir al concesionario y ver todos los colores, todas las opciones, todas las cosas que puedes pedir en el auto... y quieres ver rebajas explosivas de algún tipo, es mejor que esperes dos años completos”, dijo Drury, “debido a que hay mucha demanda reprimida y mucha reposición de pedidos”.

Las ventas en California en 2021 fueron una mezcla de modelos y categorías. El vehículo más vendido fue el Toyota Camry y los SUV, como el Toyota RAV4, siguen atrayendo a un amplio segmento del mercado.

Las ventas de vehículos de cero y bajas emisiones siguen aumentando en todo el estado, con matriculaciones combinadas de híbridos y vehículos eléctricos que representan el 23.4 por ciento de la cuota de mercado.

“La gente está empezando a pasarse a estos autos”, dijo Maas. “Sospecho que veremos que esa cifra sigue creciendo, sobre todo porque los precios de la gasolina siguen siendo altos”.

El Tesla Model Y, el SUV compacto de Elon Musk, fue el segundo vehículo más vendido en California el año pasado y el Tesla Model 3 terminó en quinto lugar.

La escasez de inventarios mantuvo vivo el mercado de autos usados en 2021, con un crecimiento del 6.7 por ciento. La escasez de suministros hizo que los autos y camionetas con más antigüedad fueran más atractivos, ya que las matriculaciones de vehículos de 4 a 6 años aumentaron un 21.6 por ciento en comparación con el año anterior y los vehículos de 7 a 10 años aumentaron un 25.2 por ciento.

El mercado automovilístico tiene un aspecto muy diferente al que tenía al principio de la pandemia, cuando los concesionarios tenían muchos vehículos en sus propiedades, pero demasiados asustaron a los consumidores, que estaban nerviosos a la hora de comprar un auto nuevo.

“Hemos pasado de un increíble exceso de oferta a una increíble escasez de la misma”, dijo Maas, “todo en el espacio de 24 meses”.

Autos más vendidos en California en 2021

1. Toyota Camry 61 599
2. Tesla Model Y 60 394
3. Honda Civic 59 818
4. Toyota RAV4 59 157
5. Tesla Model 3 53 572
6. Toyota Corolla 48 915
7. Ford F-Series 46 817
8. Chevy Silverado 44 670
9. Honda Accord 44 576
10. Toyota Tacoma 44 484

Fuente: Datos CNDA/AutoCount de Experian