Un oficial de CHP buscó sexo de mujeres que necesitaban su ayuda para inspeccionar sus coches
El oficial Morgan McGrew renunció después de que el CHP lo despidiera por las quejas de las mujeres a las que pidió citas o propuso sexo.
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Nicole recuerda haberse sentido agradecida de que el oficial Morgan McGrew aceptara reunirse con ella tan temprano en la mañana. La cita a las 7:30 a.m. le permitiría verificar el número de identificación de su auto y llegar a tiempo al trabajo.
Pero cuando se encontró con McGrew en el estacionamiento de la oficina de la Policía de Caminos de California de West Valley en Woodland Hills, el oficial dijo que tenía problemas para encontrar la calcomanía del número de identificación del vehículo en la puerta de su auto. Entonces la conversación cambió abruptamente.
“Pasaré este coche, y podrás obtener tu registro, si sales conmigo”, recuerda que le dijo McGrew. “Me quedé congelada”, dice.
Nicole, que habló con la condición de que su nombre completo no se publicara para respetar su privacidad, fue una de las 21 mujeres a las que McGrew propuso y acosó durante las citas de verificación del número de identificación de su auto, según los registros de una investigación interna de 2016 obtenidos por KQED y el California Reporting Project. Cuatro mujeres dijeron que McGrew se ofreció a pasar sus vehículos si iban a una cita o a un motel cercano con él. Dos dijeron que McGrew les envió mensajes de texto solicitando sexo después de anotar sus números de teléfono durante una cita para verificar el VIN. Quince describieron a McGrew haciendo comentarios que iban desde proponer sexo a hacer preguntas personales intrusivas.
McGrew renunció en 2017 cuando la Patrulla de Caminos de California le notificó que planeaba despedirlo por una variedad de malas conductas, incluyendo el intento impropio de fomentar las relaciones con miembros del público, haciendo comentarios sexuales inapropiados y proponiendo mujeres que practicaran alguna actividad sexual mientras estaba de servicio, según muestran los documentos.
Los registros proporcionan detalles sobre el tipo de conducta sexual indebida ejercida por algunos elementos de las fuerzas del orden que permaneció en secreto durante decenios, hasta que una histórica ley de transparencia exigió a los organismos el año pasado que revelaran públicamente esos documentos, incluidas las investigaciones de los agentes que habían cometido agresiones sexuales mientras estaban de servicio.
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La Ley de Derecho para saber, ha expuesto repetidos casos de abuso, que van desde oficiales correccionales de prisión y cárceles que atacaron a mujeres bajo su guardia, hasta un oficial despedido por solicitar sexo a un arrestado y otro acusado de golpear y violar a su novia.
En el caso de McGrew, el CHP no lo remitió a la oficina del fiscal de distrito del condado de Los Ángeles para decidir si se justificaban los cargos penales. Una portavoz de CHP escribió en un correo electrónico que “si hubiera habido suficientes pruebas de que un delito había ocurrido, se habría investigado y potencialmente referido a la oficina del fiscal de distrito”.
La oficina del fiscal del distrito se negó a comentar el caso. La Asociación de Policías de Caminos de California, que representaba a McGrew, tampoco respondió a las solicitudes de comentarios.
Los esfuerzos para llegar a McGrew no tuvieron éxito. Los registros de la CHP muestran que admitió haber hecho los comentarios durante las inspecciones del VIN, pero argumentó que el despido era un castigo excesivo después de sus 14 años de servicio.
“Aunque no discuto que hice comentarios inexcusables al público, los comentarios nunca fueron mal intencionados”, escribió en una carta a Asuntos Internos.
El ex Fiscal General de los Estados Unidos para el norte de California, Joe Russoniello, que revisó los archivos de asuntos internos, describió la conducta de McGrew como “un abuso de su autoridad” y dijo que estaba sorprendido de que la CHP no rhubiera remitido a McGrew al Fiscal de Distrito.
“Una agencia necesita mostrar que es seria cuando debe castigar este tipo de comportamiento”, dijo Russoniello. “Y la forma seria de hacerlo es una remisión criminal”.
Phil Stinson, profesor de justicia penal de la Universidad Estatal Bowling Green de Ohio, que ha estudiado el crimen policial, dijo que los oficiales como McGrew a menudo son descartados como “manzanas podridas”, pero que tal comportamiento es aceptado como normal en muchos departamentos de policía de EE.UU.
Las víctimas están a menudo en una posición vulnerable, y McGrew tuvo una influencia particular como resultado de su trabajo. Un vehículo registrado es a menudo clave para la movilidad, el empleo y la vida familiar de una persona. Sin el registro adecuado las personas pueden enfrentarse a multas, o incluso perder su coche.
“Estás tratando con un oficial de la ley que tiene un arma y una placa. Es una persona en posición de autoridad”, dijo Stinson. “Y es muy amenazador para una mujer encontrarse en esa situación. Es absolutamente aterrador”.
Junípero Serra fue declarado santo en 2015. Pero su papel en la colonización de California a través del sistema de misiones lo convierte en un objetivo para el derribo de estatuas.
Aún se desconoce el número de veces que el CHP ha disciplinado a un oficial por mala conducta sexual en los últimos cinco años. Una coalición de organizaciones de noticias, incluyendo KQED y Los Angeles Times, solicitaron tales registros el 1 de enero de 2019, pero la agencia tardó más de un año antes de proporcionar un solo archivo. En mayo, KQED presentó una demanda contra la CHP para forzar la divulgación. La agencia produjo la investigación interna del ex oficial McGrew poco después.
La agencia también ha liberado su investigación sobre el ex oficial de la CHP Timothy Larios, cuya relación romántica con una informante confidencial femenina comprometió una operación de narcóticos y puso en peligro a la mujer. Larios se retiró cuando la CHP le notificó que lo iba a despedir, según los registros. Un tercer archivo detalla la investigación de la agencia sobre el ex oficial John Frizzell, que fue despedido en 2014 por acariciar los senos de una mujer durante una parada de tráfico y pedirle a otra automovilista que se levantara la camisa.
En ambos casos, los documentos no dan ninguna indicación de que el CHP remitió a los oficiales para su enjuiciamiento.
Los registros muestran que la CHP comenzó a investigar a McGrew después de que una mujer hiciera una denuncia en 2016. Como Nicole, esta mujer hizo una cita con McGrew para verificar su número de VIN y poder registrar su coche en el DMV. Tenía a su hijo con ella.
McGrew le dio al niño una pegatina de el CHP e inspeccionó el vehículo.
McGrew le dijo a la mujer que le pasaría el coche si iba a un motel cercano con él, según los documentos. La mujer, que hablaba español, no entendió inmediatamente lo que McGrew estaba diciendo. Así que McGrew repitió la proposición dos veces.
La mujer entró en la oficina para quejarse del comportamiento de McGrew. Un sargento le preguntó si no entendía a McGrew por la barrera del idioma y si había estado bebiendo o tomando drogas. Dijo que no había ningún malentendido y que no estaba bajo la influencia.
Como parte de la investigación interna, el CHP envió tres rondas de encuestas a unas 150 mujeres de 18 a 40 años que habían concertado citas con McGrew durante su tiempo como oficial de inspección.
El CHP redactó incorrectamente las fechas que mostraban la duración de la investigación y el lapso del abuso de McGrew. Pero está claro que la investigación de la agencia no incluía nada en la carrera del oficial antes de que fuera asignado a las inspecciones de vehículos.
Al limitar el alcance de la investigación a los mayores de 18 años, los investigadores pueden haber pasado por alto víctimas más vulnerables.
“¿Qué pasa con el conductor de 16 o 17 años?” dijo Stinson.
Una mujer que dijo que se sintió violada después de su experiencia en la oficina de CHP dijo a los investigadores que McGrew le preguntó qué haría por él si pasaba su coche. Ella dijo que trató de reírse del comentario, pero que creía que era inapropiado”, según los registros. “Ella dijo que él hizo comentarios acerca de ‘esposarla’ y meterla en el ‘asiento trasero de su auto’”.
La mujer dijo que McGrew “mencionó que la llevaría a un motel al final de la calle”.
McGrew admitió a los investigadores que había hecho comentarios inapropiados a las mujeres mientras estaba de servicio, pero dijo que nunca tuvo la intención de hacerlos realidad. Cuando se le preguntó por qué les hacía esas propuestas a las mujeres, McGrew respondió: “Sólo para ver si ellas dicen que sí”, según las transcripciones de la entrevista en el expediente de la investigación.
McGrew, sin embargo, salió con al menos una mujer a la que acosó en el trabajo y envió repetidamente mensajes de texto a otra durante unos meses. Ambas dijeron que cortaron el contacto con él después de que sus mensajes explícitos las incomodaran.
McGrew solicitó a otras dos mujeres que tuvieran sexo por mensaje de texto después de sus citas. Los documentos muestran que McGrew se deshizo de ese celular prepago que no podía ser rastreado antes de que los investigadores pudieran mirarlo.
Muchas de las mujeres dijeron a los investigadores que no presentaron quejas sobre McGrew porque temían lo que él podría hacer. Una informó que tenía miedo de volver a el CHP para su cita de seguimiento porque tendría que ver a McGrew de nuevo.
Nicole recordó el momento en que McGrew le dijo que le pasaría el coche si salía con él. Dijo que de repente estaba hiperconsciente de su entorno, sola en un estacionamiento desierto con un hombre que estaba sentado en el asiento delantero de su coche.
Al principio, dijo, trató de reírse de su propuesta. Necesitaba que verificara el número de su coche. Pero McGrew siguió preguntando. Dos veces más, dice, se ofreció a pasarle el coche a cambio de una cita.
“En ese momento me cerré por completo, y le puse una mirada como si estuviera muy incómoda”, dice. “Y luego se puso más incómodo y finalmente se bajó de mi auto, me dio los papeles y me dijo que me podía ir. Y me fui”.
Nicole dijo que fue contactada por los investigadores de CHP meses después y les dijo lo que había pasado. Dijo que el CHP nunca le respondió para decirle lo que pasó con McGrew. Dice que también esperaba que la agencia hiciera algunos cambios como resultado de la investigación. No lo han hecho.
“No fue necesario hacer cambios en la política de CHP porque el comportamiento estaba en contra de la política de entonces”, escribió una portavoz de CHP por correo electrónico. “La conducta del empleado fue investigada y el empleado fue disciplinado apropiadamente”.
En los tres años que han pasado, Nicole dice que ha pensado mucho en ello. Su padre era un oficial de policía y antes de esta experiencia, Nicole dice que se sentía muy bien con los policías. Ya no se siente cómoda con ellos.
Dice que le hubiera gustado que el CHP hiciera un control más intensivo de los posibles oficiales para eliminar a gente como McGrew.
“¿Cómo alguien así puede llegar tan lejos?”, preguntó.
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