Desplazamiento social a la vista en Inglewood; con los Rams se dispara renta y precio de viviendas
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LOS ÁNGELES — Las instalaciones que por casi dos décadas alojaron a los usuarios del Hollywood Park Casino, en Inglewood, han pasado a ser el escenario, en construcción, que acapara la atención de los habitantes de esta ciudad, en donde tendrá su sede el equipo de futbol americano Los Ángeles Rams.
El complejo donde estará el estadio, con una extensión de 121 hectáreas, servirá para que 80,000 fanáticos vibren con los ‘touchdowns’ en la temporada 2019; asimismo, desde ya los inversionistas y empresarios se frotan las manos con el aumento del valor de los inmuebles en la zona.
Alberto Antúnez, residente en esta ciudad, tiene opiniones encontradas. En el 2009 compró su casa y, aunque no es seguidor de este deporte, se mantiene a la expectativa del impacto que pueda tener. “La zona se está expandiendo”, dijo en referencia a los nuevos proyectos que se construyen.
“El estadio va a dar más valor a las propiedades, pero hay gente que me desanima porque creen que pueda aumentar el vandalismo”, indicó a HOY con preocupación, situación que evaluará en la medida que se acerque la apertura del escenario. “Ahora mismo veo todo en 50% y 50%”.
Con la llegada de los Rams, los dueños del equipo invertirán 2,600 millones de dólares en el estadio, en donde habrá una sala de espectáculos de 6,000 asientos, además de 139,354 metros cuadrados para oficinas, un hotel con 300 habitaciones y 2,500 viviendas, entre otras estructuras.
Al avanzar este proyecto, los precios de la renta en las viviendas alrededor de este escenario se disparan. Jorge Velasco vive en Inglewood desde hace cinco años. Cuando vivía a cinco millas del extinto Hollywood Park pagaba alrededor de 875 dólares por un apartamento.
En el 2015, cuando ya se conocía que una empresa ligada a Stan Kroenke, dueño de los Rams, había comprado un terreno en la ciudad, donde viven más de 110,000 personas y el 52% son latinos, encontrar una recámara en esta área era una odisea; ahora lo que se teme es el desplazamiento.
“He visto más ‘gringos’ aquí cerca”, aseguró Velasco al detallar que rentó un apartamento por 1,000 dólares, ubicado a una milla del proyecto deportivo. “Se dice que le van a estar subiendo con lo del estadio; si aumenta más vamos a tener que buscar en otras áreas, para ver lo que más conviene”.
Los Rams se fueron de Los Ángeles en 1994. Al anunciarse de forma oficial su regreso, en enero de 2016, en las empresas ubicadas en las calles cercanas y las autoridades ven este proyecto como un negocio redondo, al considerar que el flujo de visitantes se ampliará exponencialmente.
A juicio de James Butts, alcalde de Inglewood, la preparación comenzó hace cinco años. El aumento del valor en las propiedades indicó, en entrevista con la estación KPCC (89.3 FM), es algo normal porque entre finales de 2012 y finales de 2015 se registró un incremento del 85.6% en esta localidad.
“El impacto que el estadio tendrá en los precios de la vivienda aún está por verse”, aseguró el edil afroamericano. “La realidad es que con el aumento de los precios de la vivienda, los alquileres tienden a subir y los alquileres tienden a disminuir durante épocas de recesión”.
De acuerdo a Trulia.com, en un estudio realizado en 31 vecindarios alrededor de estadios de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL), en casi dos terceras partes de las propiedades tienen un valor más altos que el promedio de barrios donde no hay escenarios deportivos.
Gerardo ‘Jerry’ Asencio, presidente de la Fundación de la Asociación Nacional de Profesionales Hispanos de Bienes Raíces (NAHREP), explicó a HOY que es el desarrollo que se genere en torno al estadio terminará consolidando el desplazamiento social, conocido en inglés como gentrification.
“La gente va a ser afectada por la ‘gentrification’, ésta va a aumentar el precio de las viviendas; a la gente se le hará difícil rentar y si no han podido comprar, cuando entre el estadio será más difícil, como ocurre en cualquier parte de Los Ángeles”, aseguró Asencio.
Inglewood tiene un déficit fiscal de 18 millones de dólares, en los últimos meses ha estado en riesgo de bancarrota. Con este proyecto, en los que se generarán alrededor de 40,000 empleos, se estima que la ciudad reciba un monto anual de 25 millones de dólares en impuestos.
En la actualidad, el precio promedio de una casa en esta ciudad es de 389,000 dólares, según el sitio de bienes raíces Zillow. En cambio, el promedio en el gran Los Ángeles es de 562,800. La proyección que realizan es que de inicio se incremente en 1 por ciento en el próximo año.
Tim Kawahara, director ejecutivo del Centro Ziman para Bienes Raíces de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), en el portal de noticias de este centro académico planteó que muchos inversores especulativos han puesto su enfoque claro en esta zona.
El académico compara este proyecto con los que se han ejecutados en Echo Park, Silver Lake, Atwater Village, el centro de L.A. y Highland Park; en Inglewood, agregó, el 64% de los residentes son inquilinos que no se beneficiarán por la plusvalía de las casas, pero enfrentarán mayores rentas.
“Inglewood está claramente al borde de una nueva era”, aseguró Kawahara, pero se cuestionó si la prosperidad será para toda la ciudad, si los residentes actuales se beneficiarán de los recursos o si serán forzados a salir. “Hay una posibilidad de consecuencias opuestas que necesitan ser manejadas”, concluyó.
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