Negros y latinos, los más vulnerables a perder sus licencia de conducir por concepto de multas pendientes de pago

En California, los negros y latinos son más propensos a perder sus licencias de conducir a causa de infracción pendiente de pago o después de ser arrestado por conducir con una licencia suspendida, según un informe publicado el lunes.

El informe elaborado por el Comité de Abogados de Derechos Civiles de la Bahía de San Francisco, examinó datos de la Oficina del Censo de los Estados Unidos, los registros del Departamento de Vehículos Motorizados de California y la información de 15 departamentos de policía y del Sheriff en el estado con el fin de documentar el impacto y relación entre las multas de tráfico pendientes de pago y la división racial.

“Las personas que no pueden darse el lujo de pagar una infracción están siendo detenidos, encarcelados y procesados, y están perdiendo sus licencias y sus medios de vida”, dice el informe. “Las comunidades más afectadas por estas políticas son las comunidades desproporcionadamente de color”.

Los conductores negros tiene una tasa mayor de arrestos que los blancos por conducir con una licencia que fue suspendida debido a una multa pendiente de pago, según el informe. Las tasas más altas de suspensión en 2014 se encontraron en los barrios pobres con grandes porcentajes de residentes negros y latinos.

En el condado de Los Ángeles, los negros representan apenas el 9,2 por ciento de la población, representan el 33 por ciento de los detenidos por conducir con una licencia suspendida de septiembre de 2013 a septiembre de 2015, según el informe.

Los blancos representan el 26,8% del condado, pero apenas el 14,8 por ciento de los detenidos por conducir con una licencia suspendida. Durante ese tiempo, el 85 por ciento de las 20.000 personas detenidas por el Departamento del Sheriff del condado de Los Ángeles por conducir con una licencia suspendida eran negro y latino, según el informe.

En San Francisco, el 5,8 por ciento de la población es negra, pero el 48,7 por ciento de los detenidos por órdenes de tráfico entre 2014 y 2015 eran afroamericanos. Los blancos representan el 41,2 por ciento de la población de la ciudad y sólo el 22,7 por ciento de las detenciones, según el grupo de abogados.

El informe basado en los datos recogidos en el último año, es la continuación de un estudio anterior realizado por el grupo y que encontró que más de 4 millones de californianos tenían sus licencias suspendidas por multas pendientes de pago desde el año 2006. El costo de las multas se disparó durante la crisis presupuestaria del estado debido a que se agregó una amplia variedad de violaciones a la lista de los programas estatales.

En respuesta al informe anterior, el Estado creó un programa para que los conductores con multas de tráfico puedan disminuir el costo de los castigos y recuperar sus licencias. La corte también eliminó el requisito que exigía a los conductores pagar las multas antes de que de pelear sus casos.

“Si bien estas acciones representan un avance significativo, no tienen en cuenta las injusticias raciales y económicos en las políticas de cobro de deudas y suspensiones de licencia de California”, señala el nuevo informe.

En California conducir con una licencia suspendida es un delito menor, y los jueces pueden emitir castigos para los conductores que no pagan sus multas o no se presentan en los tribunales para pelear su caso.

Mañana martes, un comité del Senado tiene previsto celebrar una audiencia sobre un proyecto de ley que impediría al DMV suspender las licencias debido a la incapacidad de pago o por no presentarse en los tribunales para impugnar sus casos.