Madres reciben pequeños milagros como regalo de Navidad

Para esta Navidad, Vanessa Mendoza deseaba ropa como obsequio, pero la naturaleza le brindó un regalito aún más tierno y que le pide leche.

Envuelto en un sábana y dentro de un calcetín gigante, la madre de 22 años de edad, recibió entre sonrisas y emoción al pequeño Lucas Manuel.

Vanessa dio a luz este 23 de diciembre al bebé de casi siete libras de peso y 21 pulgadas de estatura que podrá llevarse a su casa para celebrar la Navidad.

“Cuando la mujer va a dar a luz, uno siempre piensa a quien se va a parecer el bebé o si es niña o niño, pero al final de cuentas el mejor regalo es que esté saludable”, dice Vanessa mientras sujeta entre sus brazos a Lucas.

Este es el primer bebé de la joven y aunque a ella le gustan muchos los niños, dice que por ahora solamente se va a dedicar al pequeño.

“Poder llevarme a mi hijo a casa para celebrar la navidad es algo muy especial. Cuando lo vi por primera vez me puse a llorar porque fue un ser que cargué en mi vientre nueve meses y de pronto lo pude tener en mis brazos”, sostiene la señora.

A lado de Vanessa está Jose Manuel, el papá de Lucas, quien no repara en consolar a su hijo cuando este empieza a llorar.

“No siento que mi vida va a cambiar al tener mi primer bebé, siempre he sido una persona tranquila solo que ahora tendremos un niño en el hogar”, dice Jose Manuel.

No obstante el padre ya está pensando en salir con su hijo, enseñarle futbol y otros deportes.

“Voy a hacer más cosas con mi hijo que su propia mamá”, sostiene Jose Manuel entre risas.

Sin embargo, Vanessa no fue la única mujer afortunada que recibió el regalo de ser madre en el Hospital St. Joseph, de la ciudad de Orange. En este lugar hay alrededor de 35 mujeres en la sala de maternidad que esperan a sus recién nacidos o ya han dado a luz, dice Lucy Zúñiga, enfermera del hospital.

Aunque mucha gente no lo cree, “en estas épocas festivas tenemos muchos recién nacidos, ya para cuando avanzan los días, la actividad se pone más lenta”, dice Zúñiga.

“Anualmente St. Joseph ve nacer a unos 5 mil menores y envuelve como regalos a los bebes que nacen en estas épocas, porque eso es lo que son para sus padres”, agrega.

A unos cuantos pasos del cuarto de Vanessa, se encuentra Elisa Salmerón, una madre de 23 años de edad.

En su regazo duerme la pequeña Génesis, quien nació pesando ocho libras y midió 20 pulgadas.

“Génesis es mi tercer hija. Tengo una niña de casi cinco años y una de dos en el hogar”, dice Salmerón.

“Dios sabe a quién escoger para ser madre y les da ese regalo. Para mi esta niña es el mejor regalo que pude haber tenido en Navidad”, agrega.