‘Sexology’, de Quibi, la opción para los milenios que buscan consejos sobre sexo

Casual pero informativo, el programa sobre sexo y citas de Quibi, “Sexology with Shan Boodram”, es una conversación abierta sobre una variedad de temas candentes: ¿Cuál es la mejor manera de configurar tu perfil de citas? ¿Están tú y tu pareja listos para probar BDSM? ¿Qué tal algunos consejos de la vieja escuela sobre cómo practicar sexo oral? Y todo, llevado adelante por Boodram, la anfitriona, con la tranquilidad de una hermana mayor.

“Una gran parte de mi plataforma siempre ha sido la inclusión de otras personas”, le dijo Boodram a The Times. “Sé cuán enormemente importante es en este espacio, donde realmente hay un discurso singular acerca de cómo se ve el sexo o cómo son las citas para un estadounidense. Vemos la misma historia una y otra vez”. Darse cuenta de ello la ayudó a sincerarse sobre sus propias experiencias, buenas y malas.

Así, la anfitriona comienza cada episodio con una introducción al tema, dirigiéndose directamente al espectador. Después, su atención pasa a los invitados. En un segmento, invita a una pareja tímida y curiosa a dar sus primeros pasos en una celda llena de juguetes sexuales, antes de retirarse para darles espacio. En otro segmento recurrente, se une a un grupo de extraños -muchos de los cuales parecen modelos que esperan su próximo desfile-, para una sección bidireccional de preguntas y respuestas que revela la gran variedad de gustos sexuales. Al final de cada episodio, que dura de seis a ocho minutos, Boodram vuelve a hablarle al espectador con un resumen de las lecciones del día.

La autora de “The Game Of Desire: 5 Surprising Secrets to Dating with Dominance and Getting What You Want” (El juego del deseo: cinco secretos sorprendentes para tener citas con seguridad y obtener lo que deseas), Boodram se autodenomina una educadora sexual certificada, entrenadora de citas y experta en relaciones; fue anfitriona y participó en otros programas de sexo y citas anteriormente -como “Guide to Sex”, de MTV, y “Make Up or Break Up”, de Facebook Watch-.

Pero “Sexology” no es un juego de citas o un programa informativo escandaloso. Más bien, el estilo de la anfitriona se asemeja al de una facilitadora, que hace preguntas o da indicaciones para ayudar a sus invitados a abordar los problemas por su cuenta: la presencia de Boodram es relajada y paciente, además de necesaria frente a invitados con diferentes niveles de confianza, que hablan sobre sus anécdotas o experiencias sexuales. Afortunadamente, con su formato comprimido y condensado, las conversaciones en “Sexology” no abundan en silencios incómodos.

“Uno de los mejores momentos de iluminación que tuve en mis primeros años en la educación sexual fue que hay mucha información excelente”, comentó Boodram. “Pero [que es] realmente aburrida”. Y advirtió que lo contrario ocurría al mirar medios populares y el porno, donde “la información no era excelente, pero la forma de entregarla era convincente”. “Pienso en mí misma como alguien común, que da la bienvenida a la intimidad. Entonces, si quería ser esa anfitriona que entusiasmara a la persona promedio, debía utilizar las herramientas que usaban los medios populares”, comentó.

Los gráficos en colores pastel del programa y el set moderno y sencillo parecen dirigidos a los espectadores de la generación del milenio, o al menos a aquellos que aprecian su estética, y aunque los temas discutidos hasta ahora parecen una “introducción al sexo”, Boodram tiene muchas ideas de sus seguidores y lectores gracias a Twitter, y esa es la audiencia a la que intenta captar. “Las preguntas de la gente son siempre muy largas. Así que, esas son las personas a quienes tengo en mente cuando pienso en qué temas tratar”. Y a menos que haya un límite invisible establecido por la plataforma, que le impida abordar tópicos más arriesgados, “Sexology with Shan Boodram” todavía tiene mucho por explorar.

“Esta es un área en la que creo que todos deberían tener confianza y competencia”, remarca. “Espero que este programa no sea el lugar al que vayas para aprender todo y la fuente única de información, sino un catalizador para buscar más datos, iniciar conversaciones con las personas cercanas y renovar todos los días esas charlas. Espero que el show ilumine las conversaciones grupales de todos”.

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