Próximamente en un parque nacional cercano: bicicletas eléctricas
Es posible que las bicicletas eléctricas motorizadas pronto se abran camino en...
WASHINGTON — Las bicicletas eléctricas pronto estarán zumbando en parques nacionales y otras tierras públicas en todo el país, bajo una nueva orden de la administración Trump, rechazada por muchos grupos en favor del medio ambiente, que permite las llamadas bicicletas eléctricas en cada sendero federal donde una de tipo normal puede transitar.
Las ventas de las bicicletas, impulsadas tanto por pedales como por baterías y pequeños motores, están en auge, y algunas personas mayores o que están fuera de forma han favorecido el cambio de reglas. El giro les permitiría subir y bajar senderos para andar en bicicleta en los aproximadamente 400 parques nacionales del país y en otras propiedades administradas por el gobierno federal.
El ciclismo ha sido parte de esa buena vida en Copenhague durante décadas. En los últimos años, ha disfrutado de otro aumento insondable de popularidad, llevado al siguiente nivel gracias a la mejora constante de los carriles para bici, junto con el temor al cambio climático.
El secretario del Interior, David Bernhardt, firmó la orden sin fanfarrias el jueves, clasificando las bicicletas eléctricas como bicicletas no motorizadas y otorgando a las agencias 14 días para ajustar sus reglas.
“La reducción de la demanda física para operar una bicicleta ha ampliado el acceso a las oportunidades recreativas”, escribió Bernhardt en la orden.
En Bar Harbor, Maine, el viernes, Gordon Goodwin, de 69 años, dijo que él y su esposa esperan pasear en las 57 millas de caminos que serpentean por el parque nacional Acadia, que ofrece impresionantes vistas de lagos, montañas y el océano.
Los senderos son populares entre los ciclistas, pero se les prohibió el uso de bicicletas eléctricas y tuvieron que permanecer en las carreteras del parque.
La startup de San Francisco anunció que Uber hizo una “inversión considerable” en la compañía como parte de una ronda de financiación de $335 millones, y que los clientes de Uber pronto podrán alquilar un patinete eléctrico de Lime a través de la aplicación de Uber.
“Estamos entusiasmados. Realmente emocionados”, dijo Goodwin. “Hay demasiado tráfico en las carreteras principales del parque que no se puede disfrutar. Será genial entrar al parque y ver la naturaleza”.
Pero más de 50 organizaciones de caminata, paseos a caballo y otras actividades al aire libre y de conservación, incluidas la Appalachian Trail Conservancy y la Pacific Crest Trail Assn., se opusieron en una carta mandada en julio al Departamento del Interior. Dicen que la administración actuó para cambiar fundamentalmente la naturaleza de los parques nacionales con poco o ningún aviso público o un mayor estudio.
“Si estás caminando por un sendero en Utah doblando una curva y algo viene a 20 millas por hora, eso realmente cambia la experiencia”, dijo Kristen Brengel, vicepresidenta de la Asociación de Conservación de Parques Nacionales, un organización sin fines de lucro que aboga por el sistema de parques nacionales.
La ciudad de Alameda, en el área de la bahía de San Francisco, está adyacente a Oakland, pero es un mundo aparte.
“Es bastante desagradable” para aquellos que se dirigen a los parques nacionales a escapar del ruido de la ciudad y el estrés”, dijo Brengel. “Estás agregando una velocidad significativa y un acelerador a esos senderos”.
El Departamento del Interior dijo el viernes por la mañana que emitiría una declaración más tarde.
Las bicicletas eléctricas son el segmento de más rápido crecimiento de la industria de la bicicleta, con ventas en EE.UU que subieron un 72% a $144 millones el año pasado, según el Grupo NPD, que rastrea las ventas de las mismas. Las bicicletas motorizadas son populares entre los viajeros y los baby boomers que de otro modo no podrían salir en bicicleta.
Las bicicletas, que pueden costar $2.000 o más, combinan el cuadro de una normal con baterías livianas y motores eléctricos.
En los parques y otras tierras públicas, como en las calles y aceras de la ciudad, las personas que se mueven en vehículos que funcionan con motores eléctricos o de gasolina a menudo luchan por el derecho de paso con personas a pie o en bicicletas tradicionales. En el Servicio de Parques Nacionales, los funcionarios a lo largo de las décadas han tenido que clasificar cuidadosamente las reglas y los sistemas para minimizar los conflictos.
En su carta, los grupos al aire libre se quejaron de que el movimiento que permitía que las bicicletas motorizadas utilizaran los senderos para bicicletas rompe con las políticas que se remontan a principios de la década de 1970 y que limitaban los automóviles, las motocross, los vehículos todo terreno y todos los demás vehículos motorizados a carreteras y áreas designadas y senderos en terrenos públicos.
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La orden del Departamento del Interior permite que las bicicletas motorizadas que pueden alcanzar hasta 28 mph se clasifiquen como bicicletas normales.
La directiva del jueves pide un período de comentarios públicos sobre los cambios de reglas bajo la orden de Bernhardt.
La orientación debe completarse dentro de los 30 días siguientes sobre cómo los sistemas del National Park y el National Wildlife Refuge llevarán a cabo la nueva política de bicicletas eléctricas, y en las propiedades supervisada por la Bureau of Land Management y el Bureau of Reclamation.
Adam Gariepy, gerente de la tienda de bicicletas Bar Harbor, dijo el viernes que está “ contento” con las nuevas reglas. Pero tiene reservas porque algunas bicicletas eléctricas como la suya pueden alcanzar alrededor de 28 mph, dijo. “Esa velocidad podría ser peligrosa en los senderos que tienen una combinación de ciclistas, caballos y carruajes, excursionistas, familias y mascotas”.
“Es un arma de dos filos. Será genial para las personas mayores que tienen miedo de las colinas y quieren seguir escalando. Pero debería haber algún límite de velocidad con ellos”, dijo.
Brengel, el funcionario de la fundación del parque, señaló que la orden llega en una temporada en la que miles de voluntarios han estado en los parques durante todo el verano mejorando los senderos.
“Una política como esta es una bofetada”, dijo.
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