El brote de hepatitis A es un llamado a L.A. para proveer a los desamparados más baños en las calles
Un concejal de Los Ángeles hizo este martes un llamado a la ciudad para financiar los sanitarios portátiles de emergencia para detener la amenaza de salud pública que representa el brote de hepatitis A entre las personas sin hogar.
El concejal de Westside, Mike Bonin dijo que debido a la escasez de baños públicos, las personas sin hogar se ven obligados a defecar en las calles. Los funcionarios de salud pública, que la semana pasada declararon el brote de hepatitis A en Los Ángeles, dicen que la enfermedad se transmite comúnmente por heces, a través de comida o actividad sexual con personas contagiadas.
“La situación actual no es tolerable ni humana, y es un riesgo para la salud pública”, dijo Bonin en una moción secundada por el concejal José Huizar.
La portavoz de Bonin, Jamarah Haynar, dijo que el personal de la ciudad reportará al comité de desamparo y pobreza del Consejo en un lapso de 14 días acerca del financiamiento e instalación de baños portátiles en zonas como Skid Row y Venice.
El concejal espera que una propuesta formal pueda llegar al pleno del consejo en octubre, dijo Haynar.
Bonin pidió que se estudie el lanzamiento de un baño móvil y un programa de lava manos similar al que se está llevando a cabo en la ciudad de San Francisco.
Haynar dijo que Bonin ha estado trabajando durante meses en mejorar el acceso a los baños para las personas sin hogar. La declaración del brote de hepatitis A, le dio mayor sentido de urgencia a su trabajo.
El 20 de septiembre funcionarios de salud del condado de Los Ángeles declararon un brote de hepatitis A en Los Ángeles después de un pronunciamiento similar en el condado de San Diego, donde 450 personas fueron infectadas por el virus, 16 de ellas fatalmente.
Sólo 10 personas de Los Ángeles han contraído hepatitis A, principalmente por contacto con personas infectadas por el virus altamente contagioso en San Diego o Santa Cruz, donde 69 personas han sido diagnosticadas.
Sin embargo, dos personas sin hogar en Los Ángeles que no viajaron a ningún lugar fueron identificadas la semana pasada, lo que justificó la designación del brote, dijeron funcionarios.
La mayoría de las personas se recuperan de la hepatitis A por sí solas, pero puede causar daños graves a las personas con sistemas inmunológicos comprometidos y la población sin hogar se considera particularmente vulnerable.
Los trabajadores de la salud de L.A. están inspeccionando los campamentos callejeros y esperan vacunar a 40.000 personas sin hogar, así como a reclusos en la cárcel, usuarios de drogas y proveedores médicos.
Suscríbase al Kiosco Digital
Encuentre noticias sobre su comunidad, entretenimiento, eventos locales y todo lo que desea saber del mundo del deporte y de sus equipos preferidos.
Ocasionalmente, puede recibir contenido promocional del Los Angeles Times en Español.