RodrÃguez hace su trabajo; Devers decisivo; jonrones de Puig y Hernández
Redacción deportes EE.UU — Una vez más el trabajo de los peloteros latinoamericanos encabezados por el abridor venezolano Eduardo RodrÃguez y el dominicano Rafael Devers, con los Medias Rojas de Boston, fue decisivo en la victoria que su equipo logró a domicilio en el Cuarto Partido de la 114 edición del Clásico de Otoño, que ahora dominan por 3-1 al mejor de siete.
Cuando los Medias Rojas estaban perdiendo 4-0 ante los Dodgers en el séptimo episodio parecÃa poco probable que el equipo visitante pudiese remontar y más después que el equipo angelino habÃa logrado marca de 54-0 en partidos de la temporada regular en los que tuvo esa ventaja parcial.
Pero la labor de RodrÃguez en cinco entradas y dos tercios no se merecÃa una derrota con esa desventaja y Devers estaba listo para salir como emergente y hacer que la historia fuese diferente con su aportación y los jonrones que pegaron Mitch Moreland y Steve Pearce .
A pesar que le hicieron cuatro carreras, incluido el cuadrangular de tres anotaciones del jardinero cubano Yasiel Puig , RodrÃguez completó una gran labor, algo que reconoció el propio manejador boricua de los Medias Rojas, Alex Cora.
“Estoy bien orgulloso de Eddie (RodrÃguez)â€, declaró Cora. “Fue increÃble verlo hacer eso y ponernos en posición de ganar cuando hacÃa tiempo que no abrÃa. Su repertorio de lanzamientos estuvo ahÃ. Probablemente fue su mejor salida de la temporada. Un simple pitcheo lo puso en una posición difÃcil y por poco nos cuesta el juegoâ€.
Pero con una rotación agotada y sin muchas opciones, lo hecho por RodrÃguez fue más de lo que pudo haberle pedido Cora tras haberse ido la pasada noche con el derecho Nathan eovaldi como relevista por seis entradas de las 18 que se disputaron cuando lo tenÃa programado para ser el abridor del Cuarto Juego.
“SabÃamos que Eddie nos iba a brindar una buena apertura y eso fue lo que hizo y con matrÃculaâ€, destacó Cora.
Por su parte, RodrÃguez reconoció que salió al montÃculo con toda la confianza de hacer una gran labor, que pudo quedar empañada con un sólo lanzamiento que falló.
“Creo que fue una buena actuación, la que tuveâ€, declaró RodrÃguez. “Creo que fue solamente un pitcheo que fallé, que fue del jonrón de Puigâ€.
Pero fue entonces cuando surgió la figura de su compañero Devers, quien tras los cuadrangulares de Moreland y Pearce, inició el racimo de cinco anotaciones en el noveno episodio que hicieron posible la remontada y el gran triunfo de los Medias Rojas tras conseguir nueve carreras consecutivas sin respuesta alguna de los Dodgers.
Como emergente frente al relevista derecho Dylan Floro, Devers conectó un sencillo por el medio del terreno que fue el principio de una reacción de cinco carreras de los Medias Rojas.
“Emocionanteâ€, declaró Devers, quien a sus 22 años se convirtió en el jugador más joven en poner su equipo arriba en el noveno episodio en adelante desde que el colombiano Edgar RenterÃa dejó en el terreno a los Indios por los Marlins en el Juego 7 de la Serie Mundial de 1997. “Siempre estoy preparado desde el primer episodio, por si me necesitan. Trato de ayudar al equipo lo más que puedaâ€.
En el cierre del noveno, fue una jugada brillante de Devers ante un batazo por la raya de la tercera de parte del dominicano Manny Machado que ayudó a preservar la victoria con un inconsistente Craig Kimbrel en el montÃculo como cerrador.
“Es un juego de instintosâ€, expresó Devers. “QuerÃa asegurarme de tirar duro, porque Machado corre bienâ€.
El bateo oportuno y la defensa de Devers hizo que los cuadrangulares de Puig y Hernández para los Dodgers quedasen en un segundo plano y se limitasen a formar parte de las estadÃsticas finales del partido, mientras que los 54.400 aficionados presentes en el Dodger Stadium se vinieron abajo.
Tanto Puig como Hernández reconocieron que no era fácil asimilar una derrota como la que habÃan sufrido después de tener una gran ventaja en el marcador, jugar en su campo y estar a nueve “outs†del triunfo que necesitaban.
“Es difÃcil, pero también somos conscientes que ahora lo único que cuenta es el quinto partido que debemos ganar si queremos seguir con vida y para eso hay que olvidarse de lo que sucedió esta nocheâ€, admitió Puig. “Sabemos que podemos ganar y saldremos de nuevo al campo con esa mentalidadâ€.EFE
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