López Obrador defiende gestión en Ciudad México como su mejor aval político - Los Angeles Times
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López Obrador defiende gestión en Ciudad México como su mejor aval político

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EFE

El candidato izquierdista Andrés Manuel López Obrador presenta su gestión al frente de la Ciudad de México como su mejor aval de éxito político, mientras sus detractores lo consideran como un ejemplo del fracaso de sus recetas populistas.

Amplio favorito en los sondeos para la elección presidencial del 1 de julio, López Obrador ha logrado que su victoria se vea como inevitable por algunas analistas, tras las derrotas que sufrió en los comicios de 2006 y 2012.

Y entre los argumentos que repite como garantía de lo que seria una gestión exitosa al frente del gobierno de la república mexicana, López Obrador presenta los logros sociales y económicos que obtuvo cuando fue el jefe de gobierno de Ciudad de México del 2000 al 2005.

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“Sigue representando un ejemplo de buen gobierno que ha impactado todo el proceso electoral que vivimosâ€, afirmó a Efe Alfonso Ramírez Cuéllar, exdiputado federal de 2003 al 2006 por el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD).

La mejora en la seguridad pública y los programas sociales que promovió como alcalde son los casos de éxito mas citados en el programa del candidato presidencial del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y los Partidos del Trabajo (PES) y Encuentro Social (PES).

“Como gobernante de Ciudad de México mostró que se pueden hacer cosas distintasâ€, declaró a Efe el presidente de Morena en Ciudad de México, Martí Batres.

Compañero de López Obrador desde el PRD, Batres resalta que ya gobernante en la capital mexicana el candidato presidencial exhibió “trazos de lo que se puede hacer en material social†en la actualidad.

El catedrático universitario en ciencia política Salvador Mora opina que López Obrador dejó pendientes en temas sociales y sus éxitos en materia de seguridad corresponden a una política que se aplicó desde 1997 en la gestión municipal de Cuauhtémoc Cárdenas.

En lo social fue asistencialista y clientelar; en lo económico nunca se distanció del mercado y siempre fue evidente su intención de fundar un partido, afirma este profesor de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Mora sostiene que a la luz de su derrota en las presidenciales de 2006, ante Felipe Calderón, del conservador Partido Acción Nacional (PAN), es evidente que “no hizo suficiente†como jefe de gobierno en la capital mexicana.

“Creo que este es el punto que habría que ver: ¿le sirvió haber gobernado la Ciudad de México? No fue suficienteâ€, sostiene el catedrático.

Asegura que López Obrador “tiene un pensamiento bastante conservador†como lo muestra el hecho de que dejó pendientes los temas del matrimonio entre personas del mismo sexo y el aborto, que fueron aprobados en la siguiente gestión de Marcelo Ebrard.

El catedrático criticó las ayudas económicas a los ancianos de más de 70 años que implementó López Obrador, programa por el que más se le identifica hasta la fecha, como una medida que daba recursos mínimos, pero no “mejores condiciones de vidaâ€.

En materia económica, López Obrador mantuvo una modelo de gestión “pro mercado†que mediante exenciones de impuestos a empresarios promovió la inversión privada en programas como el proyecto que rehabilitó el centro de la capital mexicana.

Para Ramírez Cuéllar, el rescate del centro histórico con inversión privada fue una muestra del éxito de López Obrador en la promoción de la inversión y de la obra pública.

“Los mexicanos lo ven como un gobierno que disminuyó los índices de delincuencia, la impunidad, que hizo un programa sin precedente en material social, factores que siguen pesando en el recuerdo de los ciudadanosâ€, consideró Ramírez Cuéllar.

Como jefe de Gobierno, López Obrador estableció la primera pensión económica para ancianos en México con una ayuda mensual, programa que fue replicado por otros gobiernos en todo el país.

Una reciente encuesta de Consulta Mitofsky destacó que López Obrador cuenta con el 44,5 % de preferencia del voto a seis semanas de las elecciones contra un 28 % del conservador Ricardo Anaya y un 19,8 %, del oficialista José Antonio Meade.

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