Gobernador de Florida urge a Senado aprobar ayuda tras paso de huracanes
Miami — El gobernador de Florida, Rick Scott, instó hoy al Senado a aprobar “de inmediato” un paquete de ayuda para solventar los estragos ocasionados tras el paso del huracán Irma y ayudar a los puertorriqueños que han llegado al estado desplazados por María.
Estos recursos de emergencia están destinados especialmente al cultivo de cítricos de Florida y a proporcionar fondos críticos para los estudiantes desplazados de Puerto Rico debido a los daños causados en septiembre por el huracán María en la isla caribeña, reseñó Scott en una misiva al Comité de Asignaciones de la Cámara alta.
El gobernador dijo que espera ver que la industria de los cítricos reciban su parte justa basado en las pérdidas estimadas de 760 millones de dólares debido a Irma, que ocasionó al menos 84 muertes en el estado.
“Después de la devastación del huracán Irma, y ahora con cientos de miles de familias que llegaron a Florida desplazadas por el huracán María, nuestro estado ha seguido luchando por una recuperación total”, señaló Scott en la carta.
Más de 295.000 puertorriqueños han llegado a Florida desde el pasado 3 de octubre, según el Equipo de Respuesta de Emergencia del Estado (SERT, en inglés).
Scott tiene previsto acudir este jueves a una mesa redonda con líderes educativos de Florida, funcionarios comunitarios y organizaciones de voluntarios para discutir los esfuerzos de ayuda en curso para aquellos que han sido desplazados por el huracán María en Puerto Rico.
Scott también solicitó que los 12.000 millones de dólares en fondos de infraestructura provistos al Cuerpo de Ingenieros del Ejército puedan gastarse en reparaciones de la represa Herbert Hoover Dike, operada por el gobierno federal.
Recordó que si bien la Cámara baja aprobó esta importante financiación, el Senado debe dejar muy claro que la represa es parte de este paquete.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó en diciembre pasado un paquete conjunto de ayuda suplementaria de 81.000 millones de dólares, destinado a territorios afectados por los huracanes y que incluye una partida de 2.600 millones para el sector agrícola de Florida, el principal proveedor de cítricos del país.