Economía mexicana “modera” su crecimiento por consumo privado y manufactura
México — La economía mexicana registra una “moderación del crecimiento” en el tercer trimestre, según datos preliminares, debido a la pérdida de poder adquisitivo de las familias por la inflación y el freno de las manufacturas, afirmaron hoy expertos consultados por Efe.
De acuerdo con los datos divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el producto interior bruto (PIB) de México aumentó 1,6 % en el tercer trimestre de 2017 respecto al mismo período de 2016, y un 1,7 % sin factores coyunturales por temporada.
En cifras originales, la estimación trimestral supone una leve desaceleración del crecimiento económico respecto al periodo abril-junio de 2017, cuando el PIB registró un incremento del 1,8 % en términos reales.
La “moderación” de las tasas de crecimiento es “una tendencia que se va a mantener de aquí a fin de año, principalmente por el tema del consumo privado”, afirmó a Efe Alejandro Saldaña, analista económico del banco Ve por Más.
Las familias “han moderado su consumo”, por tener unos ingresos en términos reales menores. En el aspecto del poder adquisitivo, afecta la alta inflación del país; en septiembre, la interanual se situó en un 6,35 %.
Durante este trimestre, los sectores terciario y primario avanzaron un 2,4 % y 0,9 %, respectivamente, mientras que el secundario experimentó una disminución del 0,5 % en comparación con el tercer trimestre de 2016.
Respecto a los tres meses anteriores, se registró un incremento en el sector primario (0,5 %) y retrocesos en el secundario (0,5 %) y el terciario (0,1 %).
El director general de Análisis Económico y Relación con Inversionistas de Grupo Financiero Banorte, Gabriel Casillas, considera que en estos resultados se percibe la “desaceleración” en las manufacturas.
De cara a la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), firmado entre México, Canadá y Estados Unidos, “muchas empresas de manufacturas adelantaron sus exportaciones durante la primera mitad del año”, por el temor a que el diálogo entre los tres países no diera buenos resultados.
Por eso el país experimentó “una expansión en la primera mitad del año”, pero estos adelantos “no pueden seguir para siempre”, comentó Casillas.
La economía del país “ha sido mucho más resiliente a los temas de falta de confianza que ha generado la incertidumbre del TLCAN, o a todas las declaraciones de Trump”, valoró.
Dijo que en el análisis realizado por Banorte, se ha constatado que los sismos de los pasados 7 y 19 de septiembre, que causaron un total de 471 fallecidos, no dejaron “ningún efecto” en la economía mexicana.
“Cuando la infraestructura se destruye no le pasa nada al PIB, el problema es cuántos días está la actividad económica parada”, cosa que no ocurrió, explicó.
Además, en los estados del centro y sur del país donde impactó el terremoto, el freno en la actividad económica “fue compensado por todas las compras que se hicieron, porque la gente se volcó para comprar agua y víveres para ayudar a los damnificados”, argumentó Casillas.
Por su parte, Saldaña indicó que “probablemente durante el último trimestre de 2017 o en el primer trimestre de 2018”, los esfuerzos de reconstrucción tras la catástrofe podrían suponer “un apoyo al crecimiento”.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, sí atribuyó el “pequeño retroceso” mostrado por los datos preliminares del PIB al “efecto que tuvieron en la economía los sismos”.
Durante el acto de inauguración de la Terminal 4 del Aeropuerto Internacional de Cancún, en el sureste del país, el mandatario dijo que, no obstante, las cifras “dejan ver que la economía está creciendo”.