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Reabre 12 horas antes de lo previsto el paso de San Ysidro a Tijuana

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El paso fronterizo de San Ysidro (California) a Tijuana (México), que fue cerrado este sábado para acometer obras con vistas a su ampliación, reabrió hoy doce horas antes de lo previsto, confirmó la Agencia General de Servicios (GSA).

El transitado acceso hacia la aduana mexicana El Chaparral se mantuvo cerrado durante 45 horas este fin de semana, tiempo en el cual personal de construcción procedió a desmantelar infraestructura, como muros de contención y un toldo, que se encontraban al sur de las dos principales autopistas de San Diego.

Los cruces peatonales tanto de México a Estados Unidos como a la inversa permanecieron abiertos, así como el cruce de vehículos de México a Estados Unidos.

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Las obras forman parte de la última fase en el proyecto de expansión de la garita internacional de San Ysidro, el cual quedará listo en 2019.

El cruce fronterizo entre Tijuana y San Diego es considerado el más transitado a nivel mundial, con una afluencia promedio de 50.000 vehículos y 25.000 peatones cada día. En promedio, cada fin de semana transitan cerca de 40.000 vehículos por el paso desde San Ysidro hasta México, según estimaciones de la GSA.

El caos de vehículos que se anticipaba que iba a producir el cierre no tuvo lugar. La comunidad fronteriza o bien se abstuvo de viajar o reprogramó su viaje o bien utilizó el transporte público para evitar demoras en el cruce.

“Estamos enfocados en terminar los trabajos lo antes posible y liberar la autopista”, dijo hoy a Efe Anthony Kleppe, director de proyecto por parte de GSA.

No se prevé volver a cerrar en su totalidad el acceso hacia México en los dos años que restan al proyecto de remodelación.

En un inicio se había contemplado que una vez que terminaran los trabajos se cerrarían dos carriles para vehículos hacia México para continuar con obras del proyecto, pero finalmente solo quedará cerrado uno de los cinco carriles actuales.

Una vez que concluya el proyecto en 2019, el tráfico de la autopista tendrá una ruta directa hacia la aduana El Chaparral y existirán casetas de inspección para funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), al igual que un área de segunda revisión.

“Al final, (la comunidad fronteriza) va a contar con una instalación de primer nivel, que cumpla con las necesidades de la región San Diego-Tijuana para las próximas generaciones”, concluyó Kleppe.

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