Los CDC emiten una alerta por zika para la frontera de Texas y México
Austin (TX) — Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) emitieron hoy una alerta por incremento del riesgo de contagio del virus zika para la ciudad texana de Brownsville, fronteriza con la mexicana Matamoros.
La agencia de salud recomendó a los viajeros, especialmente a las mujeres embarazadas, que eviten Brownsville y su zona inmediata, ya que el contagio de zika puede acarrear complicaciones a los fetos, como microcefalia y otras malformaciones congénitas.
En caso de vivir o trabajar en esta ciudad del sur de Texas, las autoridades sanitarias aconsejaron a las embarazadas que hagan todo lo posible para prevenir las picaduras de mosquito y sugirieron evitar las relaciones sexuales o usar preservativo.
Hasta ahora, únicamente hay cinco casos conocidos del virus transmitidos por mosquitos en el área de Brownsville, los últimos cuatro confirmados la semana pasada.
Estos nuevos casos se detectaron en una zona muy próxima al primero, contraído por picadura y anunciado el pasado 28 de noviembre.
“Todavía no hay evidencia de propagación local del zika”, indicó la agencia, que, no obstante, reconoció que el clima de Texas es “propicio” para la expansión de la transmisión local de este virus.
De acuerdo con el digital The Texas Tribune, el director de los CDC, Tom Frieden, aseguró que la agencia está trabajando con el Departamento Estatal de Servicios de Salud de Texas, el Departamento de Salud del Condado de Cameron y el Departamento de Salud de Brownsville para buscar información nueva cada día.
“Junto con los funcionarios de Texas estamos trabajando para proteger a las mujeres embarazadas de los efectos potencialmente devastadores de este virus”, aseveró Frieden.
En julio se confirmaron los cuatro primeros casos de infección del virus del zika por mosquitos dentro de Estados Unidos, concretamente en la ciudad de Miami (Florida).
Sin embargo, la semana pasada el gobernador de Florida, Rick Scott, declaró libre del virus el último foco de transmisión localizado en Miami.
Hasta el 7 de diciembre, 4.575 personas se habían infectado del virus en Estados Unidos, casos en su mayoría relacionados con viajes a zonas de riesgo, según datos de los CDC.