El senador Durbin admite retos para aprobar ley que proteja a los “soñadores”
Chicago (IL) — El senador por Illinois Richard Durbin reconoció hoy que será “muy difícil” sacar adelante el proyecto de ley que elabora su colega republicano Lindsey Graham para proteger a los “soñadores” debido a la dificultad de conseguir el necesario apoyo conservador en el Congreso.
El dirigente demócrata, que se reunió hoy en Chicago con jóvenes inmigrantes amparados por la Acción Diferida (DACA) del presidente Barack Obama y podrían perder esta protección cuando Donald Trump llegue a la Casa Blanca en enero, dijo en conferencia de prensa que ha hablado con varios colegas preocupados por esta situación.
“Pero va a ser muy difícil conseguir el apoyo republicano”, declaró Durbin sobre el proyecto de ley bipartidista que se prepara para extender la protección legal a los cerca de 750.000 jóvenes que recibieron el amparo de DACA, pese a que la iniciativa surge de un republicano como el senador por Carolina del Sur.
Según informó, sus colegas republicanos tendrían “miedo a la reacción política” si dan un paso al frente en favor de los indocumentados ahora que fue elegido Trump, que basó parte de su campaña en medidas antiinmigrantes, y apoyan este texto legislativo, que podría ser presentado en el Senado en la primera semana de enero.
Consultado por Efe, dijo que el presidente electo no ha designado todavía al futuro secretario de Seguridad Nacional, un cargo que consideró “muy importante” en esta materia porque tiene bajo su mando a Inmigración.
“Me preocupan algunos de los nombres que se manejan, pero no quiero especular”, respondió el legislador, que ha sido una de las voces destacadas del Senado en la lucha por la protección de los jóvenes indocumentados, junto con Graham.
Sobre la designación del senador por Alabama Jeff Sessions como futuro fiscal general dijo que es una voz contraria “a los inmigrantes, DACA y el DreamAct”, con quien habrá que trabajar sobre el tema.
Durbin informó de que tiene una reunión programada con Sessions, en la que, explicó, cree que él le va a “pedir el voto (para su confirmación en el cargo), pero yo iniciaré la conversación con el tema de DACA”.
No se conocen mayores detalles del proyecto de ley de Graham, que, según Durbin, será “una protección temporal”, pero lo suficiente como para que los jóvenes se sientan seguros mientras se discute en el Congreso el futuro de la inmigración.
“Tenemos que enfrentar el problema migratorio, cambiar la legislación, pero mientras lo hacemos no podemos abandonar a quienes tienen la protección de DACA”, expresó Durbin.
La retórica de Trump contra los inmigrantes ha provocado temor entre los jóvenes y sus familias, y en la reunión de hoy hubo llantos y llamados emotivos al futuro presidente para que se comprometa con DACA y no los deje en un limbo legal.
Los jóvenes quieren estar seguros de que se mantendrá la protección para los inmigrantes que voluntariamente dieron información personal al Gobierno federal y pasaron por una revisión de antecedentes.
Obama anunció en el verano de 2012 la puesta en marcha de DACA para proteger temporalmente a los jóvenes indocumentados que llegaron al país siendo niños.
Sin embargo, al ser una medida ejecutiva, Trump puede derogarlo o cambiarlo una vez que tome posesión de su nuevo cargo el próximo 20 de enero, tal y como prometió durante la campaña presidencial.
DACA, que permitió a los “soñadores” acceder a un permiso de trabajo y residencia temporal, logró que estos jóvenes salieran “de las sombras” y se inscribieran de manera voluntaria en una lista del Gobierno, que tiene sus huellas dactilares y la dirección de sus casas, por lo que temen ser expulsados del país por Trump.
El propio Graham dijo esta semana en el Senado que “lo peor sería revocar el estatus legal que tienen estos niños. Estés de acuerdo con que lo tengan o no, han salido de las sombras”.
Graham ha informado de que trabaja con congresistas de ambos partidos y citó al senador por Arizona Jeff Flake, también republicano, como uno de los que apoyan su iniciativa.
Los republicanos controlan ambas cámaras legislativas, pero en el Senado lo hacen por la mínima, 51 votos sobre 100, por lo que, con el apoyo de Graham y Flake, se podría aprobar el texto, que, sin embargo, enfrentaría problemas en la Cámara de Representantes, donde los conservadores tienen una amplia mayoría.
Durbin, Graham y Flake formaron parte del denominado Grupo de los Ocho, que en 2013 presentó una reforma migratoria bipartidista que fue aprobada en el Senado pero que quedó estancada en la Cámara baja por el bloqueo republicano.
“Es el momento de sanar las heridas que nos dividieron durante la elección, y que comencemos por los jóvenes que van a mejorar a este país y lo harán más fuerte en los próximos años”, dijo hoy Durbin.