Cumplen última voluntad de Carlos Marín - Los Angeles Times
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Cumplen última voluntad de Carlos Marín

El cantante Carlos Marín en una imagen de archivo.
(Agencia Reforma)
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Cumpliendo con el deseo que Carlos Marín expresó antes de fallecer el pasado 19 de diciembre en un hospital de Manchester, Alemania, por las complicaciones derivadas de la Covid-19, los restos mortales del artista fueron velados en una funeraria de San Isidro, ubicada en Madrid.

Al lugar acudieron, además de numerosos admiradores, sus familiares más cercanos y el amor de su vida, Geraldine Larrosa, más conocida por su nombre artístico, Innocence.

“Se ha ido mi gran amor, treinta años que he estado con él, hemos estado siempre juntos, estos últimos dos años hemos estado juntos. Habíamos sobrevivido a la pandemia y al final la pandemia me lo ha quitado. Era la persona más buena del mundo, el artista más grande de España y del mundo entero, es que no me lo creo todavíaâ€, dijo Larrosa al medio español.

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El cantante había estado en coma inducido, pero este domingo falleció a causa del coronavirus

Completamente destrozada por haber perdido al hombre con el que siempre mantuvo una estrecha relación, la artista confesó, sin poder contener las lágrimas a su llegada a la capilla ardiente, que a pesar de no haber trascendido públicamente, habían retomado su relación durante la pandemia y tenían planeado volver a pasar por el altar. Algo que ya no sucederá.

Marín y Larrosa se casaron en 2006, en una boda de ensueño. Luego de 13 años de noviazgo, el artista organizó en secreto, y en un mes, su casamiento para sorprender a su pareja en un viaje laboral a Los Ãngeles y San Diego.

Un día antes del enlace, el cantante le pidió matrimonio. Su boda se llevó a cabo en Disneyland. Sin embargo, en 2009 se separaron mediante un acuerdo mutuo y ambos reconocieron que sus familiares se sorprendieron, porque formaban una pareja idílica. Siempre en buenos términos y manteniendo una estrecha relación.

Después de esta despedida pública al barítono, Carlos, de 53 años, fue incinerado en la más estricta intimidad por expreso deseo de su familia.

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