La tasa de transmisión de COVID-19 del condado de Los Ángeles aumenta a medida que se esperan las cifras del Día del Trabajo

Este año ha habido un 18% más de muertes en el condado de Los Ángeles que durante el mismo período de 2017, 2018 y 2019.

La directora de Salud Pública del condado de Los Ángeles, Bárbara Ferrer, dijo el miércoles que aunque no todas las muertes en 2020 han estado relacionadas con COVID-19, el aumento se traduce en “miles de decesos que de otra manera no habrían ocurrido” sin el virus.

Ferrer señaló que los datos refutan las teorías de que el virus no es más grave que la influenza.

El nuevo coronavirus ha matado a más de 6.000 personas en el condado. Las autoridades anunciaron 31 muertes adicionales el miércoles y 1.265 casos, por un total de más de 260.200 infecciones confirmadas.

En las últimas semanas, los funcionarios han informado de una disminución en las infecciones, hospitalizaciones y defunciones. El recuento diario de casos es actualmente de siete casos por cada 100.000, y la tasa de positividad promedio de siete días es del 3%, una caída notable con respecto al 8% informado en julio. Esas métricas bajas podrían impulsar al condado hacia adelante en el sistema de reapertura del estado si se mantienen durante dos semanas consecutivas.

Pero en el transcurso de la semana pasada, el número de casos aumentó levemente y la tasa de transmisión proyectada pasó del 1% al 1.02%. Es posible que esos números sean indicadores tempranos de que habrá un incremento en las infecciones relacionadas con la actividad del fin de semana del Día del Trabajo, pero Ferrer informó que los funcionarios están monitoreando los datos hasta el final de la semana para evaluar si esa puede ser la realidad.

“Esta es una semana crucial para nosotros”, manifestó.

El condado ha seguido viendo que miles de puestos de prueba quedan sin llenar. Los incendios forestales, el calor y la mala calidad del aire que mantuvieron a las personas adentro en las últimas semanas pueden haber contribuido a esa disminución, señaló la directora de Salud y Servicios Humanos, la Dra. Christina Ghaly. La caída en las pruebas es una preocupación para la comprensión del condado de la tasa real de infecciones y cuán extendido permanece el virus.

Y aunque una métrica como las hospitalizaciones es baja, es un indicador rezagado para comprender el verdadero alcance del virus porque el recuento de casos aumenta antes de las hospitalizaciones o las muertes.

En julio, por ejemplo, el condado experimentó un número relativamente bajo de hospitalizaciones antes de que ocurriera un aumento masivo después del feriado del 4 de julio.

“Creo que aprendimos mucho”, aseguró Ferrer sobre cómo las experiencias pasadas han informado la comprensión actual de los funcionarios sobre el virus.

Bajo la nueva guía estatal anunciada el martes, el condado ahora puede abrir operaciones en interiores en salones de uñas. Los funcionarios de salud están trabajando con la Junta de Supervisores para determinar cómo se verá ese cronograma para la reapertura. Los oficiales han dicho anteriormente que cualquier cambio no se produciría hasta finales de septiembre, luego de los posibles datos del fin de semana del Día del Trabajo.

Para leer esta nota en inglés haga clic aquí