Anuncio

Brotes de coronavirus afectan a Farmer John y otras empresas en Vernon

La planta Farmer John, productora del Dodger Dog, se encuentra entre las instalaciones que reportaron brotes de COVID-19.
(Al Seib / Los Angeles Times)
Share via

Los brotes de COVID-19 han afectado a nueve instalaciones industriales en Vernon, incluidas cinco plantas empacadoras de carne, informaron funcionarios de salud del condado de Los Ángeles.

El brote más grande ocurrió en la planta Farmer John, propiedad de Smithfield Foods, productor del querido Dodger Dog, donde 153 de 1.837 empleados dieron positivo para COVID-19 entre marzo y mayo, reveló el Departamento de Salud Pública.

Las otras ocho instalaciones con brotes son CLW Foods (carne), Vie De France Yamazaki (productos horneados), California Farms Meat (carne), Takaokaya USA (té verde), F. Gavina & Sons (café), Golden West Trading (carne), Overhill Farms (alimentos congelados) y Rose & Shore (embutidos y alimentos preparados).

Anuncio

Formados en el extranjero, los médicos cubanos tratan a sus colegas emigrantes en la frontera con Estados Unidos, que está efectivamente cerrada durante el brote de coronavirus.

Entre cinco y 24 empleados en cada una de las instalaciones dieron positivo, según los datos del condado, aunque no estaba claro cuándo se actualizaron esos números por última vez. Según los estándares del condado, se produce un brote cuando cinco o más trabajadores contraen el nuevo coronavirus.

Aunque Vernon tiene sólo unas pocas docenas de residentes y es casi exclusivamente industrial, los trabajadores que han contraído el virus en la ciudad al sur de Los Ángeles podrían propagarlo en sus propias comunidades, advirtió el condado. El domingo, funcionarios de salud informaron 940 nuevos casos de coronavirus y 14 muertes relacionadas en todo el condado.

“Estamos monitoreando de cerca los brotes dentro de las instalaciones en la ciudad de Vernon, ya que muchos de los empleados residen en las comunidades adyacentes del sureste de Los Ángeles”, manifestó Bárbara Ferrer, directora de salud del condado.

Los trabajadores se hacinaban virtualmente hombro con hombro para atender las líneas de producción que se movían a velocidades inexorables, altos índices de enfermedades y lesiones, bajos salarios y reglas implacables sobre el tiempo libre o los descansos para comer o ir al baño. Las descripciones de la actual industria empacadora de carne suenan tomadas de Upton Sinclair.

Freddie Agyin, director de control de salud y medio ambiente de Vernon, dijo que la ciudad está colaborando con el condado de Los Ángeles para asegurarse de que los empleados que resultaron positivos, así como otros con los que se pusieron en contacto mientras trabajaban, estén en cuarentena durante 14 días.

“Ha sido muy preocupante ver estos números”, comentó Agyin sobre los brotes. “Si no siguen las pautas establecidas [por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades], el trabajo de todos será mucho más difícil”.

En un comunicado, Smithfield Foods dijo que sus trabajadores son “cruciales para la respuesta de nuestra nación al COVID-19”.

“Les agradecemos por mantener los alimentos en las mesas de Estados Unidos y hemos implementado medidas agresivas para proteger su salud y seguridad durante esta pandemia”, manifestó el comunicado.

Smithfield expuso que esas medidas incluyen una serie de pautas y protocolos estrictos que siguen o superan las pautas emitidas por los CDC y la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional.

La compañía reveló que aumentó su suministro de mascarillas y protectores faciales, instaló barreras de plexiglás en el piso de producción y en las áreas de descanso e implementó sistemas de escaneo de temperatura masiva para evaluar a los trabajadores.

A los empleados se les ofrecen pruebas gratuitas para el nuevo coronavirus y el tiempo de cuarentena pagado, y se les dice que no se presenten a trabajar si están enfermos, dijo Smithfield. La compañía también ha relajado sus políticas de asistencia, eliminó los copagos por el tratamiento relacionado con el coronavirus y extendió un beneficio de licencia remunerada a los trabajadores considerados médicamente en riesgo.

De los 153 empleados de Farmer John que dieron positivo, 41 han regresado a trabajar, según los funcionarios de salud del condado de Los Ángeles.

Los investigadores están desconcertados: ¿Por qué el coronavirus -que típicamente dura dos semanas en el cuerpo- perdura mucho más tiempo en algunos pacientes?

“Durante esta pandemia, toda nuestra industria se enfrenta a una elección difícil: continuar operando para mantener el suministro de alimentos o el aislamiento en un intento de brindar seguridad por completo del riesgo a nuestros empleados”, expuso la compañía en un comunicado emitido a principios de mayo.

“Es un dilema horrible; no es uno que le deseamos a nadie. Es imposible mantener la proteína en las mesas en todo Estados Unidos si las plantas de carne de nuestra nación no están funcionando”.

El brote en la planta Vernon de Smithfield es el más grande que figura en la lista del Departamento de Salud Pública del condado en un entorno no residencial.

Los brotes de COVID-19 han afectado a las plantas de procesamiento de carne de res, cerdo y aves de corral en todo el país desde marzo.

Según un análisis de la organización de noticias sin fines de lucro ProPublica, se han relacionado más de 10.000 casos con plantas empacadoras de carne de EE.UU, y al menos tres docenas de trabajadores murieron a principios de mayo.

Muchos de esos trabajadores son miembros de comunidades vulnerables de refugiados e inmigrantes.

Dada la naturaleza del trabajo, con cientos de empleados de pie laborando hombro con hombro durante horas cada día, clasificando, cortando y empacando la carne que alimenta a los estadounidenses, tales plantas se han convertido en puntos críticos de virus.

En las potencias agrícolas de Iowa y Dakota del Sur, cerca de una quinta parte de la fuerza laboral en los mataderos más grandes de los estados había enfermado, según un informe de los CDC publicado a principios de este mes.

En California, al menos 138 empleados de Central Valley Meat Co. en Hanford dieron positivo para el virus. Esa compañía emplea a unos 900 trabajadores en sus dos plantas; la otra está en Vernon.

Para leer esta nota en inglés, haga clic aquí.

Anuncio